Los trabajadores de Nissan han aprobado este jueves en asamblea el acuerdo alcanzado entre sindicatos y la dirección de la multinacional para el cierre de sus plantas en Barcelona. Lo han aprobado por una amplía mayoría y con poco votos en contra en una votación a mano alzada frente a la fábrica de Montcada i Reixac (Barcelona).

La dirección de Nissan y los sindicatos han conseguido llegar a un acuerdo este miércoles por la tardetas, según han informado fuentes de la conselleria de Trabajo de la Generalitat.

La mediación entre los trabajadores y la empresa empezó de manera telemática el pasado martes a las 18.30 horas, convocada por el departamento que dirige el conseller Chakir El Homrani.

Desde entonces, ambas partes han seguido negociando sobre las condiciones del cierre de las fábricas de la Zona Franca de Barcelona, Montcada i Reixac y Sant Andreu de la Barca (Barcelona) y el correspondiente expediente de regulación de empleo (ERE).

El acuerdo, alcanzado después de 25 horas de negociación, mejora también las condiciones de las indemnizaciones aunque no hasta el punto que reclamaban los sindicatos, que también se han comprometido a abandonar la huelga que lleva ya 90 días. Los trabajadores retomarán la actividad para hacer frente a los pedidos que estaban pendientes desde mayo.

Después de más de dos meses enconados en posturas casi irreconciliables, el acuerdo tiene que ser ahora ratificado en una asamblea que se celebrará mañana jueves. El objetivo de los trabajadores era aplazar el cierre de las fábricas, anunciado en principio para finales de este año, con el fin de buscar una alternativa industrial a estas plantas y de mantener los puestos de trabajo hasta que pudiesen recolocarse en una nueva actividad. Además, los sindicatos reclamaban mejores condiciones para los despidos. Nissan, por su parte, ha intentado forzar la aceptación de una propuesta que finalmente ha tenido que revisar.

Las negociaciones empezaron en junio, tras el anuncio del cierre de las plantas de Nissan en Zona Franca, Montcada i Reixac y Sant Andreu de la Barca (la planta de El Prat de Llobregat queda fuera de los cierres) han estado marcadas por posturas muy enfrentadas hasta la última hora.

El pacto prevé que el cierre de las plantas se aplace un año, hasta finales de 2021. Tanto el Gobierno como la Generalitat pedían este tiempo para poder buscar una alternativa industrial a las fábricas que quedarán vacías.

La empresa ha aceptado comprometerse a no despedir de forma forzosa a los trabajadores mientras continúe la actividad, que será hasta diciembre de 2021, y a establecer medidas alternativas de carácter industrial y de flexibilidad interna para evitar despidos. En este tiempo sí podrá haber bajas voluntarias.

Indemnizaciones

Las indemnizaciones previstas serán para los menores de 50 años de 60 días por año trabajado pero sin tope de mensualidades. La empresa también ha creado un convenio especial para el grupo de trabajadores que tienen entre 50 y 54 años (los nacidos en 1967 recibirán el 85% del salario neto hasta los 61 años; los de 1968, el 80%, y los de 1969, el 75%). Para los mayores de 54 años, se incluye un complemento de hasta el 90% del salario neto hasta los 62 años, con la retribución del convenio especial hasta los 63 años.

Sobre el futuro de las fábricas, las dos partes se comprometen a buscar alternativas industriales, junto con las administraciones central y autonómica. El objetivo de este compromiso es garantizar durante tres años la ocupación de los trabajadores que opten a recolocarse. De no cumplirse esta garantía, los trabajadores afectados recibirán un pago de 25.000 euros. Aquellos trabajadores que opten por la reindustrialización percibirán una indemnización de 50 días por año trabajado sin límite, y una percepción lineal de 750 euros por cada año de antigüedad.