Los datos de la Organización Mundial del Turismo (OMT), entidad de la ONU, muestran un panorama de la industria turística de 2020 que las empresas y profesionales del sector sufren a diario desde que estalló la pandemia. Reducciones radicales de los movimientos de viajeros, restricciones de movimientos entre países y, como consecuencia, desplome de los ingresos que tiene un impacto más grave en economías, como la de España en donde el turismo representa el 13% del PIB. Con los datos disponibles, OMT prevé que el regreso a los niveles de 2019 en términos de llegadas de turistas llevaría entre 2 y 4 años.

La OMT señala en su último informe que los viajes turísticos internacionales se han hundido un 65% en la primera mitad del año, lo que equivale 440 millones de turistas menos. Es una evolución sin precedentes, que se debe al temor a la propagación del coronavirus que conllevó un cierre de fronteras de dimensiones mundiales. La reducción de ingresos ha descendido en paralelo y marcan, asimismo, récord desde la segunda guerra mundial.

La zona de Asia-Pacífico ha sido la más castigada y ha registrado un descenso en el número de turistas del 72% en la primera mitad del año. Detrás va Europa, con una con una caída del 66%, mientras que el golpe en América ha sido del 55% y del 57% en África y Oriente Medio.

El informe da datos por zonas más concretas; el noreste asiático (-83%) y la Europa meridional mediterránea (-72%) sufrieron las peores caídas, si bien «todas las regiones y subregiones del mundo registraron descensos de más del 50% en las llegadas en el periodo enero-junio de 2020». La contracción se refleja en una reducción de dos dígitos del gasto del turismo internacional, con la paralización de los grandes mercados emisores, como Estados Unidos y China.

Para el secretario general de la OMT, Zurab Pololikashvili, este barómetro pone de relieve «el profundo impacto que esta pandemia está teniendo en el turismo, un sector del que dependen millones de personas para ganarse la vida». Mas en su opinión «en muchos lugares del mundo es posible hacer viajes internacionales de manera responsable y segura, y es imprescindible que los Gobiernos colaboren estrechamente con el sector privado para lograr que el turismo mundial se ponga en marcha de nuevo. La acción coordinada es clave”.

En este contexto, la OMT considera muy probable que la demanda de viajes y la confianza de los consumidores se mantengan bajas, lo que incidirá en los resultados de 2020. En mayo, la OMT perfiló tres posibles escenarios, que apuntaban a declives de entre el 58% y el 78%. Las tendencias actuales durante el mes de agosto apuntan a una caída de la demanda más cercana al 70% (escenario 2).

Para 2021 espera que se inicie un proceso gradual de recuperación siempre que se vaya hacia un levantamiento de las restricciones de viajes, y que se disponga de una vacuna o tratamiento eficaz contra el coronavirus.