Societe Generale, BNP Paribas y, en menor medida, Credit Agricole centran la atención de los inversores ante las noticias (desmentidas por parte de las autoridades francesas) que hablan de falta de liquidez y necesidad de recapitalización.

Fuentes del mercado subrayaron a diarioabierto.es que el esfuerzo conjunto del BCE, el Banco Nacional de Suiza, el Banco de Japón y la Reserva Federal por garantizar la liquidez en dólares de los bancos europeos va especialmente destinada a la banca francesa, cuya exposición a la deuda griega ha limitado extraordinariamente su capacidad de financiarse en esta divisa.

Por cuestiones estratégicas y también legales, muchos fondos americanos han rebajado su exposición a la banca francesa por el temor a una quiebra en Grecia y la banca de ese país ha dejado de prestar a los bancos europeos en general desde mediados del pasado mes de agosto.

Para terminar de configurar el panorama, el Banco de China (estatal) ha supendido sus operaciones en divisas y swaps con los tres grandes franceses y con el suizo UBS. Para los franceses alega que ha superado el riesgo recomendable y en el caso del suizo la decisión viene motivada por el «agujero» encontrado por la entidad por operaciones no autorizadas.

Sin embargo, muchos observadores y el Gobierno francés subrayan que el movimiento el Banco de China es en realidad una nueva maniobra de presión del gobierno de este país para conseguir que la UE reconozca a China como economía de mercado, un reconocimiento que lleva aparejadas ventajas en las transacciones comerciales.

Con todos estos datos sobre la mesa, la gota que ha colmado hoy el vaso ha sido la publicacion por parte de Financial Times de una infomación que asegura que Siemens retiró en el pasado mes de julio 500 millones de euros de un fondo de Societe Generale por la desconfianza en las cuentas del banco francés.

Siemens ha reconocido la operación pero ha subrayado que no ha estado motivada por desconfianza sino por la escasa rentabilidad que había obtenido su inversión, algo que no termina de convencer al mercado, que presiona a la baja a estos valores entre rumores no confirmados de que uno de los bancos franceses ha acudido a la «ventanilla nocturna» de liquidez en dólares del BCE para conseguir 500 millones de dólares.

Entre tanto, las autoridades se han limitado a subrayar que han puesto a diposición de todas las entidades europeas una línea de financiación en dólares ante los problemas que la banca europea atraviesa para conseguir financiación en esta divisa y señalan su esperanza de que la situación se normalizará cuando se alcance un acuerdo con Grecia para el desembolso de la ayuda financiera que necesita.