Debo decir que adoro los trenes. Por tanto calificar a algo de ferroviario, para mí es utilizar un adjetivo laudatorio. Escuchando el nuevo álbum de Thurston Moore, ex guitarrista, cantante y compositor de Sonic Youth, me trae a la cabeza sonidos, texturas y ritmos de trenes. Eso sí, a pesar de lo que pudiera parecer a primeros oído y vista, rigurosamente vigilados. Crea ambientes caóticos y de desenfreno instrumental siempre controlados.

Su nuevo álbum en solitario, “By The Fire”, es como un convoy de nueve vagones a cual más cargado de tesoros entre melodías delicadas, energía apabullante y pasiones desbordadas. Un Orient Express por la elegancia de las armonías y un Ave a cuatrocientos kilómetros de oro por su vértigo y fortaleza.

Entre Velázquez y Picabia

Un disco abrasivo, pero también de ronroneos morbosos. Un álbum oscuro, pero de atmósferas rayanas en el pop y el blues psicodélico. Un trabajo experimental y cautivador; con un pie en el clasicismo rock y otro en la vanguardia por sus pinceladas egregias y rompedoras. No en vano, entre los pintores favoritos de Moore se encuentran Francis Picabia y Velázquez, como dejó claro en el cuadernillo del álbum “Demolished Thoughts” y en los dibujos y letras de  “Psychic  Hearts”.

“By The Fire” se abre con “Hashish”, cautivadora canción que sirve de prólogo para explicar de qué va el disco, con melodías envolvente y aires repetitivos a lo Can y Amoon Dull 2. Muy cinematográfico, haría las delicias del primer Werner Herzog. La siguiente se inicia con un riff de guitarra casi hard rock y la voz perezosa de Moore. Nos hace pensar que el ferrocarril se encuentra con pequeños obstáculos en la vía. Se titula “Cantaloupe” y crece con un solo de guitarra tan esbelto que recuerda a Hendrix, Kaukonen y Clapton juntos en una reunión.

Paisajes de nieve

 

 

Con “Breath”, el tren avanza despacio por serenos paisajes de nieve, mientras amanece en el tibio vagón. De repente, la locomotora se encabrita y despeja a los viajeros. Diez minutos de sorpresa y expectación. “Calligraphy” es otro caminar suave, ligero, hasta entrar en un túnel nigérrimo que provoca un climax inquietante y seductor. Liviana como tren de juguete de madera o de cristal frágil. En “Locomotives” vuelve la potencia y el rugir de la guitarra.

“They Believe In Love (When they Look At You)”, hace el transcurrir relajado. Parece vaticinar parada en la próxima estación. Pero no, hay que seguir. El tren no para aún. Falta una “jam sesión” apabullante en “Venus” donde Moore; Deb Googe, bajista de My Blodie Valentine”); James Sedward, guitarra de Chrome Hoof y Steve Selley ex batería de Sonic Youth, envuelven la estación término de vapores y humos que hacen pensar en cómo se inició el trayecto de este viaje fantástico. Un viaje de desmadres rigurosamente controlados.

Sello: Daydream Library. Precio: 13. Discografía (en solitario): “Demolished Thougts”, “The Best Day”, “Rock&Roll Consciusness”. Influido por: Glenn Branca, Zappa, Hendrix. Influye en: Kurt Vile, Ty Segall, Dinosaur Jr, Oh Sees.