Los ciberataques en España han registrado un aumento «cualitativo y cuantitativo» durante la pandemia y han incrementado su gravedad, advierte la directora del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Paz Esteban, en las XIV Jornadas de ciberseguridad organizadas por el Centro Criptológico Nacional.

La crisis del coronavirus no ha generado nuevos riesgos, pero sí ha supuesto un «potenciador» de tendencias ya existentes, precisa. Los ciberataques detectados por el CNI con el baremo de riesgo muy alto han multiplicado ya por dos los registrados en todo 2019. Los ataques críticos han superado también a los del pasado año.

Esto se debe a la situación «excepcional» que ha supuesto la crisis del coronavirus, que obligó a desarrollar de forma urgente mecanismos de teletrabajo, comercio electrónico o  plataformas digitales, lo que a su vez generó «nuevos escenarios de riesgo para las organizaciones».

Uno de los sectores más vulnerables ha sido precisamente el sanitario, que ha sufrido numerosos ataques en forma de ‘ransomware’, que impide a los usuarios acceder a su sistema informático o a sus archivos personales y que exige el pago de un rescate para poder acceder de nuevo a ellos, señala el subdirector general del Centro Criptológico Nacional, Luis Jiménez, que avisa que los ataques durante la pandemia han recurrido a «elementos más sofisticados y virulentos».

El director del Departamento de Seguridad Nacional, Miguel Ángel Ballesteros, cree que elementos que se han multiplicado durante la pandemia, como el teletrabajo, el comercio electrónico o las reuniones virtuales «han venido para quedarse», y por eso es necesario garantizar que se hacen a través de métodos seguros. Esto afecta a todos los niveles, desde cualquier ciudadano en su hogar hasta las más altas esferas del Estado. Y ha puesto el ejemplo del Consejo de Ministros, que tuvo que celebrarse de forma virtual en hasta una veintena de ocasiones cuando los sistemas de seguridad del Estado no estaban preparados para ello.

Ballesteros añade que hay que integrar a las comunidades autónomas en el sistema de seguridad nacional y de ciberseguridad. «Ellas tienen la responsabilidad de la gestión sanitaria y no se puede gestionar una crisis sin ellas», argumenta, por lo que pide un sistema lo «suficientemente engrasado» que no dé lugar a «discrepancias».

Tanto Luis Jiménez como Miguel Ángel Balleteros coinciden en poner el foco en la tecnología 5G y en el Internet de las Cosas, para que puedan desarrollarse garantizando la seguridad de los usuarios.Y advierten del déficit de expertos en ciberseguridad, que se acrecienta ante la dificultad de mantener el nivel de conocimiento ante el rápido avance de las nuevas tecnologías.