La prolongación de restricciones en Alemania hasta mediados del mes de febrero dará como resultado el estancamiento del crecimiento del PIB de la mayor economía europea, según las previsiones del Instituto de Investigación Económica de Múnich (Ifo), que anticipa un rebote del 3% de la actividad en el segundo trimestre, siempre y cuando los confinamientos se levanten «a más tardar en marzo».

«Cada semana que se prolonga el bloqueo conduce directamente a pérdidas en las ventas, la producción y el valor agregado», señaló el economista jefe del Ifo, Timo Wollmershäuser.

En este sentido, si bien reconoció que el impacto de las restricciones sobre los proveedores de servicios directamente afectados por los cierres será similar al de la primavera de 2020, añadió que la situación en la industria y sus proveedores de servicios parece ser significativamente diferente.

De este modo, el experto subrayó que si las medidas implementadas se revirtieran a más tardar en marzo, el crecimiento del PIB volverá a aumentar en el segundo trimestre en proporción semejante a la pérdida registrada, por lo que al impacto del primer trimestre seguiría una rápida recuperación «más fuerte cuanto más fuerte fue la caída», como sucedió en 2020.

El PIB de Alemania registró en 2020 una contracción del 5% en comparación con el año anterior, cuando había crecido un 0,6%, poniendo así fin a diez años consecutivos de expansión como consecuencia del impacto de la pandemia, aunque finalmente su efecto haya resultado menos grave que el de la crisis financiera, que en 2009 hundió un 5,7% el PIB alemán.