Existen lugares en el mundo que esconden curiosidades únicas. Es el caso del pueblo mexicano de Jala, que se ha popularizado por cultivar las mazorcas de maíz más grandes del planeta. Además de tener un patrimonio cultural y arquitectónico muy interesante que le ha hecho merecedor del título de Pueblo Mágico, Jala ha conseguido llamar la atención por el desorbitado tamaño de sus mazorcas, que se han convertido en uno de sus bienes más preciados.

La raza de maíz Jala, única en el mundo, es característica por su longitud, que ha llegado a alcanzar casi medio metro de largo. Su origen y cultivo se han ubicado exclusivamente en este municipio, y está asociado incluso con expresiones culturales y religiosas de la región. La razón de semejante tamaño parece estar en la calidad de la tierra de este pueblo nayarita.

Tal es la popularidad que ha alcanzado este maíz, que cada año durante el mes de agosto se suele celebrar la Feria del Elote, en la que se premia a la mazorca más grande. Todos los agricultores locales presentan anualmente a comienzos de ese mes sus mejores selecciones para perseguir este ansiado galardón. Durante esta singular fiesta, dedicada también a la Virgen de la Asunción, se pueden disfrutar de puestos de comida a base de maíz, conciertos, eventos deportivos, etc. En cada edición dan gracias a la virgen por la calidad excelente de su tierra, cuya fertilidad se cree que es debida a las cenizas ricas en minerales que esparció el volcán del Ceboruco cercano al pueblo, que entró en erupción en el año 1870.

Pero Jala es mucho más que maíz. Las calles y edificios de este rincón cercano a la Riviera Nayarit, y en el mismo estado de Nayarit, han sido protegidos por el Instituto Nacional de Antropología e Historia. Recorrerlo es una experiencia que lleva a descubrir la esencia de México. Gracias a sus monumentos históricos y a la naturaleza de su alrededor, especialmente el volcán del Ceboruco, con más de dos mil metros de altitud, este pueblo recibe miles de visitantes cada temporada.

Las casas señoriales y los edificios nobles proliferan en las calles de este pintoresco rincón mexicano. Entre ellos destaca la basílica lateranense de Nuestra Señora de la Asunción, construida en 1856 y de estilo romano y gótico. Otra de las visitas imprescindibles es el Museo Comunitario de Jala, instalado en una casona decimonónica y donde se expone una gran colección de piezas precolombinas y tradicionales del territorio nayarita.

Jala se encuentra a 130 kilómetros de la Riviera Nayarit, conocida internacionalmente como la joya de la costa del Pacífico. Situada en el estado mexicano de igual nombre, la región ofrece más de trescientos kilómetros de litoral cristalino, las montañas de Sierra Madre, la bahía Banderas y un sinfín de maravillas naturales protegidas. Riviera Nayarit es el hogar de la ciudad balnearia Nuevo Vallarta, la villa histórica de San Blas, el exclusivo paraíso de celebridades Punta de Mita, la meca del surf boho-chic conocida como Sayulita y una gran variedad de pintorescas villas de pescadores. Las actividades para aventureros y deportistas también abundan, y van desde cursos de golf, tirolina, buceo y surf, hasta avistamiento de aves, ballenas y programas de liberación para las tortugas.