El “desgaje” de Casado

03/02/2021

Luis Díez.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cumplimentó el miércoles, 3 de febrero, en el Congreso de los Diputados a los dirigentes de las derechas y al portavoz de ERC. Abrió el turno de la primera sesión de control del año en curso el jefe de filas del PP, Pablo Casado, quien encadenó una sucesión de críticas, descalificaciones y epítetos (le llamó “trilero”) contra a Sánchez hasta desembocar en la cuestión: la gestión del fondo europeo para el relanzamiento económico. “¿Por qué ha arrancado el informe del Consejo de Estado? ¿Quiere manejar los fondos europeos sin control? ¿Por qué rechaza la autoridad independiente?”, le preguntó.

Se notó el interés de Casado en seguir buscando argumentos para justificar lo injustificable ante su menguante clientela: la decisión de votar en contra de la inyección obtenida por el Ejecutivo en Bruselas de 140.000 millones de euros en seis años. La apelación de Casado a lo ocurrido en los ERE en Andalucía más parece obedecer al dicho popular: “Cree el ladrón que todos son de su condición” que a la talla que cabía esperar de un jefe de la oposición. Pero en el “desgaje” del informe del Consejo de Estado que debía de acompañar el decreto convalidado la semana pasada por el Congreso ha hallado el jefe del PP un argumento superior. Y en él incidió el subjefe Teodoro García Egea en su también habitual mezcla de cuestiones y denuestos contra el vicepresidente Pablo Iglesias.

Se apreció también en las palabras de García Egea el resquemor contra la ultraderecha por haber facilitado con su abstención la aprobación del decreto de ayudas. “Vox y el Gobierno son socios, dele las gracias”, dijo Egea a Iglesias, al que, en realidad le preguntaba por los “okupas”, pero, igual que su jefe Casado, utiliza el “dadaismo” y, al final, obligó a Iglesias a explicarle que el método dadaista de poner frases al azar para componer el poema le conduce al “ridículo”. “El Gobierno hace política, ustedes el ridículo”, le dijo.

Se percibió asimismo un disgusto mal disimulado entre sus señorías del PP cuando el presidente Sánchez, en respuesta al jefe de los vóxidos, Santiago Abascal, le reconoció que en la aprobación de los fondos europeos “demuestra más responsabilidad y sentido de Estado que el jefe de la oposición”. Eso no evitó que Sánchez descalificara la política de la “mentira masiva”, la trifulca, el odio, la violencia y la división que practica la ultraderecha, ni que le deslizara la cuestión de si Bolsonaro o Tramp habían gestionado mejor la pandemia que la señora Merkel o el señor Macrón. En realidad lo que interesaba al ultraico era jalear la campaña contra los inmigrantes africanos que llegan a Canarias.

Aunque Sánchez dejó sin aclarar la avería por la que el decreto de fondos europeos llegó al Grupo Popular sin el preceptivo informe del Consejo de Estado, lamentó que Casado haya iniciado el año nuevo “con la misma mala sombra” del anterior y, tras reprochar su voto contrario a los fondos europeos, le rogó que practique “una oposición útil e informada” porque “es mentira”, le dijo, que Francia, Italia y Grecia hayan designado una autoridad independiente para la canalización del fondo de recuperación. Lo que han creado, igual que en España, es una comisión consultiva, dijo. La vicepresidenta Nadia Calviño abundó en los sectores y las políticas prioritarias al tiempo que cifró en 40.800 millones de euros las ayudas a familias y empresas desde el comienzo de la pandemia y anunció emisiones de deuda pública por valor de 150.000 millones.

¿Te ha parecido interesante?

(+2 puntos, 2 votos)

Cargando...

Aviso Legal
Esta es la opinión de los internautas, no de diarioabierto.es
No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
Su direcciónn de e-mail no será publicada ni usada con fines publicitarios.