Una brecha de 2.000 a 4.000 euros por trabajador y año ha desencadenado la huelga en Tordera, uno de los cuatro centros de distribución de Inditex en Cataluña. Se trata de la “primera huelga” en una de las ramas de la cadena logística que la multinacional tiene en la comunidad catalana. “Una huelga histórica”, según Comisiones Obreras (CCOO), que, a las 11.30 h, cifró en un 85% la participación en la huelga de los trabajadores de los turnos de noche y mañana.

Un 85% de los trabajadores del centro logístico de Oysho en Tordera, una localidad al norte de Barcelona, próxima a Lloret de Mar, secundaron hoy lunes en los turnos de noche y mañana el paro convocado en la plataforma de distribución de la ropa interior y de baño de la multinacional gallega.

Un portavoz de la dirección del grupo Inditex, consultado por diarioabierto.es, declinó hacer declaraciones sobre este conflicto laboral, que afecta a unos 120 trabajadores.

La diferencia salarial emerge como el motivo principal que ha llevado a la huelga a los trabajadores de Tordera.

Según CCOO, los trabajadores del centro de distribución de Oysho cobran anualmente unos 22.500 euros, entre fijo y variable. En cambio, en los centros de Bershka y Massimo Dutti, propiedad también de la multinacional gallega, los salarios se sitúan en 24.500 euros y 26.400 euros, respectivamente.

La negativa de la dirección de Inditex ha disparado la huelga, después de que el jueves esta dirección se reafirmara en su intención de negarse a las aspiraciones salariales de la plantilla de Tordera, tal y como se constató en la preceptiva sesión de mediación previa a la huelga.

CCOO califica de “histórica” huelga la de Tordera, al tratarse, sostienen, de la “primera huelga” que tiene lugar en uno de los centros logísticos de Inditex en Cataluña. En 2019, otra convocatoria, en esta ocasión en el centro de distribución de Stradivarius en Manresa, se canceló finalmente al lograrse un acuerdo entre los trabajadores y la dirección.

CCOO afirma que, en esta ocasión, la multinacional alega que la situación de pandemia impide acceder a las pretensiones de los trabajadores de Tordera. Sin embargo, replican desde el sindicato, la plantilla del centro de distribución ha seguido prestando servicios, incluso en “los peores momentos de la crisis sanitaria”.

La clave del conflicto, según el sindicato, se sitúa en la negativa de la multinacional a firmar un acuerdo marco que iguale las condiciones laborales en sus diferentes centros de distribución repartidos por Cataluña.

“Tener un convenio único en todos los centros de distribución evitaría lo que está ocurriendo ahora mismo en la planta de Oysho”, resalta un portavoz sindical.

Preguntados por este periódico, la dirección de Inditex declinó hacer declaraciones sobre la huelga, al tratarse de una “cuestión sindical”, afirmó un portavoz.