Uno de los platos más característicos de nuestra gastronomía que gusta a todo el mundo es el cocido. Esta semana se celebra su Día Internacional, una excusa ideal para probar esta receta atemporal. Además, os sugerimos también otro plan irresistible: la XI Ruta del Cocido Madrileño. Se trata de una propuesta para degustar diferentes recetas, en toda la comunidad, Toledo y Segovia, hasta el 31 de marzo y votarlos a través de www.rutadelcocidomadrileño.com. El pasado año se sirvieron cerca de 120.000 cocidos. Además de los archiconocidos La Bola, La Cruz Blanca, Lhardy, Malacatín, La Daniela o El Charolés, tomad nota de algunos restaurantes donde elaboran un cocido rico, rico.

Prístino. En plano paseo de Eduardo Dato se puede disfrutar de la receta tradicional en tres vuelcos: sopa, verduras y garbanzos, y carnes. Es un restaurante que participa en la ruta y donde hacen muy buenos los platos de cuchara porque buscan su inspiración en las casas de comida de toda la vida, aunque en un entorno refinado y elegante. Además, acaban de estrenar jefe de cocina: Roberto Serrano. El cocido que sirven es fruto de una técnica de elaboración que impone, además de buenos ingredientes, largas horas de cocción. Así se extrae todo el sabor. El precio del cocido es de 22 euros y existe la posibilidad de maridaje.

Café de la Ópera

Café de la Ópera. Otro de los establecimientos madrileños que va a participar en esta XI edición de la Ruta del Cocido Madrileño. Este restaurante con mucha solera y una ubicación privilegiada, cuenta con un plato espectacular que ya ha sido galardonado en 2015 por tener los mejores garbanzos, que puedes disfrutar tanto en sala como en terraza. Y por primera vez es posible disfrutar de esta exquisitez culinaria desde casa gracias a su nuevo servicio a domicilio, donde cada detalle ha sido tenido en cuenta para vivir una experiencia lo más parecida posible a degustarlo en sala.

Casa Elena

Casa Elena. Nos trasladamos hasta la provincia de Toledo para probar un muy buen cocido, también en tres pasos: la sopa, el garbanzo (Km 0 de La Sagra), siempre acompañados de verduras y patata, y, por último, la carne. Este restaurante destaca por su pasión por los productos de calidad y una filosofía slow food, con producto ecológico, de Km 0. El cocido es una de las recetas que ha pasado de generación en generación en la familia propietaria. Se llama Casa Elena en honor a su abuela, la propietaria de esta preciosa casona que data de 1920 y cuyo salón principal eran las antiguas caballerizas. En este restaurante manchego, tesoro gastronómico de Cabañas de la Sagra, se puede desconectar, cambiar de aires y disfrutar de lo auténtico.

La Clave

La Clave. Reconocido por muchos como el mejor cocido de la capital de los últimos tiempos, La Clave ha recibido también del Club de Amigos del Cocido la nota media más alta de España, 8,55 sobre 10 a su cocido especial, el único en cuatro vuelcos. Bajo la dirección de Tomás Gutiérrez, el chef toledano Pepe Filloa rescata una tradición serrana: la croqueta de pringá, elaborada con el tocino, el chorizo y la morcilla sobrantes del cocido como primer vuelco. Cebolleta y guindilla acompañan a la sopa de fideos, calentita y desgrasada, que recoge la esencia de garbanzos, verduras y carnes. El tercer vuelco agrupa los productos de la tierra: garbanzos de La Moraña (Ávila), zanahoria, repollo y cachelo de Lugo, con relleno o pelota y salsa de tomate. Por último, viandas o vuelco de carnes: morcillo de ternera joven asturiana, tocino, morcilla y chorizo ibéricos, gallina campera, hueso de jamón de bellota y hueso de caña con tuétano. El precio es de 28 euros con 15% de descuento si se recoge en el local.

Comercial

Café Comercial. Un lugar castizo donde la historia de Madrid se palpa en cada rincón y donde otorgan el protagonismo que merece a este plato insignia de la capital. El chef Pepe Roch sabe que el secreto de un buen cocido no es otro que contar con los mejores ingredientes y mucho tiempo. Por eso, se encarga de cocer a fuego lento y durante doce horas un caldo elaborado con hueso de jamón ibérico y deliciosas carnes, al que se suman las verduras y hortalizas más frescas junto con garbanzos de Fuentesaúco, chacinas de León y piparras de Navarra. Se puede degustar los jueves y los domingos en el Café Comercial. Y ahora también en casa con su nuevo formato delivery y take away.