Conoce el país más joven del mundo

16/03/2021

Carmela Díaz.

Macedonia del Norte es, posiblemente, el país más joven del mundo. Al menos con su actual denominación que fue aprobada en febrero de 2019. El país se creó tras la disolución de la antigua Yugoslavia, pero han debido pasar tres décadas hasta que se ha ratificado su nombre. Aunque el país es pequeño, con una superficie veinte veces menor que España, sin salida al mar y en el centro de los Balcanes, tiene un pasado fascinante, con herencia griega, romana y otomana y alma balcánica, pero también mediterránea, gitana y eslava. En cuanto se pueda viajar con normalidad también contará con un interesante futuro turístico.

Los mayores atractivos naturales son las montañas, tres parques nacionales y más de treinta reservas naturales. El principal centro turístico es Ohrid, único bien cultural macedonio entre los Patrimonios de la Humanidad de la Unesco y famoso por su lago, el monasterio de San Pantaleón de Ocrida y la fortaleza de Samuel. Y algo que se suele desconocer, en su capital, Skopje, nació una mujer llamada Agnes Gonxha Bojaxhiu que se hizo célebre como Madre Teresa de Calcuta, premio Nobel de Paz y santa en la actualidad.

Un paseo por la capital. La puerta de entrada al país es Skopje, que tiene muy buenas comunicaciones aéreas con distintas ciudades europeas, incluyendo vuelos directos de Wizz Air desde Barcelona. En el recorrido por la ciudad salen al paso enormes estatuas de guerreros, edificios neoclásicos, museos revestidos de mármol, fuentes monumentales… Vale la pena pasear por el muelle del río Vardar y disfrutar del puente de piedra otomano que lo atraviesa y subir a la milenaria fortaleza Tvrdina Kale. Desde un teleférico se llega a lo alto del monte Vodno, donde la vista de Skopje y de los altos picos de las montañas son preciosas. Pero hay que dejar tiempo para recorrer las calles estrechas en el antiguo bazar, la Carsija, que es el más grande conservado en los Balcanes hoy en día, y el mayor centro de animación de la ciudad con sus callejuelas, teterías, mezquitas, tiendas de artesanía…

A las afueras de Skopje está el cañón Matka. Fue el lugar elegido por los primeros cristianos, ascetas y revolucionarios para retirarse a las colinas huyendo del avance otomano. El lugar más especial del cañón es el monasterio de Sveta Bogorodica, con las montañas de fondo. Está todavía habitado por monjas. El desfiladero donde se construyó la presa acumula la gran superficie de agua que se puede recorrer en un barco hasta la cueva Vrelo, una de las más bellas de Macedonia.

El enclave más hermoso. La visita a Ohrid, que hace frontera con Albania, justifica el viaje a Macedonia del Norte. Aquí se edificó la primera universidad de los Balcanes y se construyó el monasterio más antiguo del mundo eslavo, el de san Pantaleón. Ohrid es también una oda a la naturaleza, el lugar más bello del país, y uno de los escenarios más espectaculares de Europa, con un lago de 30 kilómetros de largo con aguas asombrosamente limpias y transparentes. En sus profundidades habita un pequeño pez llamado plasica cuyas escamas se utilizan para hacer la conocida perla de Ohrid. Esta joya se produce con un método secreto que se transmite de generación en generación. El lago, la ciudad del mismo nombre y sus alrededores son Patrimonio de la Humanidad desde 1979. El casco histórico de Ohrid, con sus estrechas callejas repletas de restaurantes y cafés, su paseo junto al lago y su playa de guijarros, ofrecen algunas joyas y muestran el arte bizantino en iglesias como Santa Sofía, el majestuoso teatro romano o la iglesia de Sveti Jovan del siglo XIII, probablemente el edificio más fotografiado del país.

Fauna y flora. Otra visita imprescindible es la del Parque Nacional de Galiçitsa entre los lagos de Ohrid y Prespa, compartidos en parte con Albania y Grecia. Además de la extraordinaria belleza natural y unas panorámicas únicas, Galiçitsa también es un entorno con una flora natural bien conservada que abarca más de 800 especies. También posee una fauna abundante y diversa con 170 especies. El pelícano blanco, el cuervo negro, la garza y la gaviota se congregan cerca del lago en el que viven variedades de peces como trucha, carpa, carpa de aleta roja, chub, barbell… Por esa zona habitan numerosos tipos de reptiles, muy abundantes en una isla de Golem-Grad, antiguo lugar de veraneo del rey. Ahora está repleta de ruinas cubiertas de vegetación y solo se puede acceder a ella alquilando un bote. Visita curiosa, pero con riesgo.

La gastronomía macedonia. Está influenciada por las especialidades turcas y griegas, aunque también contiene rasgos típicos de los Balcanes. Uno de los platos indispensables es el burek, una empanada con queso y carne picada o vegetales, y también la shopska, una ensalada con queso fresco y tomate. Entre los platos más típicos está el selsko meso que, como se dice popularmente, requiere siete horas para prepararlo y siete minutos para consumirlo. Lleva muslo de cerdo, cebolla, champiñones, pimiento rojo, sal y pimienta y se rocía con queso rallado antes de servir. Como en toda la zona balcánica, la bebida favorita es el rakia, un fuerte licor parecido al brandy que se obtiene a partir de ciruelas. Muchas familias lo preparan directamente en su casa. La cerveza skopsko y el vino Tikvesh son dos de las bebidas más valoradas. Las bodegas de Tikvesh y sus zonas de viñedos entre montañas se pueden visitar.

cof

Más información:

http://www.exploringmacedonia.com/

https://www.turismomacedonia.es/

¿Te ha parecido interesante?

(+12 puntos, 12 votos)

Cargando...

Aviso Legal
Esta es la opinión de los internautas, no de diarioabierto.es
No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
Su direcciónn de e-mail no será publicada ni usada con fines publicitarios.