Pocos lugares en el mundo ofrecen tantas posibilidades para la práctica de deportes como Canarias. Rodeadas de mar, con más de 1.500 kilómetros de litoral, con un clima templado durante todo el año y una infraestructura turística y deportiva de primer orden, estas islas son un paraíso para los amantes del aire libre que buscan sol y un sinfín de aventuras. Como las posibilidades son tantas, nos centraremos en las actividades que protagoniza el mar y de la mano de Naviera Armas, la compañía líder en transporte marítimo de pasajeros en España.

Surf. En invierno es uno de los destinos más populares de Europa, perfecto para cualquier grado de experiencia. Para los principiantes, lo mejor es Fuerteventura, principalmente Corralejo, con playas fáciles, aunque hay que tener cuidado con los arrecifes, los rompientes rocosos y los erizos de mar, por lo que mejor ir con botines. En Gran Canaria, hay que ir a Maspalomas para disfrutar de largos descansos en la playa y aguas bravas. Arietta, El Muelle y El Quemao son otros lugares de surf protegidos en la zona. La pequeña localidad costera de El Médano, en Tenerife, lleva muchos años atrayendo a surfistas de todo el mundo en busca de las mejores olas. Es conocida por sus playas poco profundas y su ubicación al lado de la imponente Montaña Roja. Además de surf, aquí podrás disfrutar de una gran variedad de deportes acuáticos: el kitesurf y el windsurf son las opciones más populares. En Lanzarote no hay que dejar de visitar un enclave casi legendario para los surfistas: el pipe canario de Famara.

Kitesurf y windsurf. Fuerteventura es un lugar ideal para relajarse y sus playas también ofrecen lugares únicos para practicar deportes acuáticos. Las aguas cristalinas, los fuertes vientos y las olas que alcanzan los dos metros de altura en algunos puntos, hacen de la isla una meca del windsurf y el kitesurf. Para los principiantes que quieran probarlo por primera vez, la playa de Sotavento es recomendable. Allí se encuentra el mítico centro René Egli. Es perfecto también para los más experimentados y el lugar de la celebración del campeonato mundial desde 1986. Un punto destacado de la playa Sotavento es la magnífica laguna, dependiente de las mareas. Ya sean principiantes, intermedios o avanzados, aquí todos pueden encontrar un curso a su medida. La proximidad al Meliá Fuerteventura y el Innside by Meliá Fuerteventura, ofrece una combinación excelente de alojamiento de alta calidad y un servicio de windsurf y kite profesional. En Lanzarote windsurfistas y kitesurfistas acuden a costa Teguise, La Santa y Famara, para practicar. Los meses de verano son los mejores ya que los vientos son más fuertes, pero las olas más grandes se dan en invierno, especialmente alrededor de Famara.

Buceo. Con siete islas principales y seis islotes más pequeños, hay un espacio marino para complacer incluso al buceador más experimentado. Y, a diferencia del Mar Rojo, el Sudeste Asiático o el Caribe, se puede llegar fácilmente a las Islas Canarias (unas 4 horas desde casi todas las capitales europeas) y es más barato. Por ello es el destino favorito de muchos buceadores para viajes cortos de buceo en invierno. Además, el hecho de que las islas estén ubicadas en medio del Atlántico, provoca que las fuertes corrientes oceánicas traigan una gran cantidad de animales marinos cerca de la costa. También es posible disfrutar del espectáculo de las mantarrayas migratorias, las tortugas marinas o los tiburones ángel.

Kayak en el mar. Se pueden buscar delfines y tortugas marinas en el sureste de Tenerife, cerca de Los Cristianos, o dirigirse a los gigantescos acantilados volcánicos de Los Gigantes. Una excursión de un día permite descubrir las cuevas secretas en la isla de La Palma con visitas a la playa de El Remo, cerca de Fuencaliente. Tanto en Gran Tarajal en Fuerteventura, como en Maspalomas en Gran Canaria, o en playa de Papagayo en Lanzarote, hay recorridos que combinan kayak de mar con snorkel.

Avistamiento de cetáceos. No es exactamente un deporte acuático, pero es una experiencia única. El clima trae ballenas y delfines a las aguas templadas que rodean las Islas Canarias. Más de veinte especies diferentes pasan por el canal entre Tenerife y La Gomera anualmente. Ballenas minke, cachalotes e incluso orcas se ven regularmente. Hace unos años, un banco de enormes rorcuales de bryde, unas grandes ballenas muy raras de ver, permaneció en la zona durante semanas. Además de los visitantes transitorios, hay grupos residentes de delfines mulares y ballenas piloto. Los barcos de observación de ballenas parten de los principales centros turísticos del sur de Tenerife, incluidos playa de las Américas y Los Cristianos. Sin embargo, los mejores lugares para hacer un viaje son puerto Colón en costa Adeje y Los Gigantes en el suroeste de Tenerife. Este último es especialmente bueno porque está justo frente s La Gomera, un territorio privilegiado para avistar ballenas y delfines. Un inciso: el avistamiento de ballenas en Tenerife está altamente regulada. Los barcos deben cumplir con un código de práctica con respecto a las prácticas de observación de cetáceos, niveles de ruido, proximidad a los animales, velocidad, tiempo que pasan cerca de cualquier criatura individual…