El expresidente de CaixaBank entre los años 2011 y 2016, Isidro Fainé, ha negado ante el juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón cualquier irregularidad por su parte en relación con la contratación de la empresa Cenyt, propiedad del comisario jubilado José Manuel Villarejo, que ha atribuido a Repsol.
Fainé insiste en que no tenía «el más mínimo conocimiento de las actuaciones que se llevaron a cabo» y que no participó «ni en la selección, ni en la contratación, ni en el pago del proveedor». No tenía «la más mínima idea de la empresa que Repsol había contratado ni de quién era el señor Villarejo, ni mucho menos si se había contratado a un funcionario de policía en activo».
Por su parte, el presidente de Repsol, Antonio Brufau, declara que supo por su jefe de Seguridad, Rafael Araujo, que se había contratado una empresa de inteligencia pero que desconocía que se trataba del comisario José Manuel Villarejo y de su firma Cenyt.
El juez parece haber estado más inquisitivo con Brufau que con Fainé. ambos imputados por un posible delito de cohecho. Los dos presidentes, que han declarado durante aproximadamente una hora cada uno, han respondido a las preguntas de sus defensas, de la Fiscalía Anticorrupción y del juez.
En esta pieza separada número 21 del caso ‘Tándem’ se indaga en el encargo por parte de Repsol y de CaixaBank a Villarejo para que espiara en 2011 al entonces presidente de Sacyr Luis del Rivero dado que éste trataba de tomar el control de la petrolera mediante un acuerdo con Pemex.
Brufau ha resaltado que él no tuvo que autorizar la contratación de esa empresa de inteligencia y que no trató el asunto con Araujo, ya que era el directivo responsable de Medios de la compañía, Luis Suárez de Lezo, quien despachaba con éste.
El jueves 6 de mayo Luis Suárez de Lezo declaró ante el juez que Araujo le comunicó que había contratado servicios de inteligencia, precisando que él no ordenó contratar a la empresa de Villarejo.
Brufau reconoce que en una conversación con Fainé le dijo que sería bueno que las dos áreas de inteligencia corporativa profundizaran en la investigación relativa a la operación de Sacyr.
Respecto a esa conversación con Brufau, el expresidente de CaixaBank admite que éste la dijo que sería conveniente tener más información empresarial sobre el pacto Sacyr-Pemex. Y que Brufau le informó de que Repsol ya tenía contratado un encargo, que lo llevaba su director de seguridad corporativa, y que le propuso compartir la información sobre el pacto.
Tras esa conversación, Fainé habría delegado el asunto en su departamento de Seguridad. Niega que ambos presidentes acordaran compartir los gastos que suponía contratar a esa empresa externa, dado que no se encargan de pagos.
Fainé se reunía de vez en cuando con el responsable de Seguridad del banco, Miguel Ángel Fernández Rancaño, para tratar asuntos relativos a la seguridad, pero que la información que le facilitó sobre este asunto fue de muy escaso interés, y nunca le entregó informes ni documentos ni le habló de «conversaciones o información personal sobre Del Rivero».
El juez ha sacado a relucir el informe de Cumplimiento que se realizó en Repsol, y por qué se decidió contratar a una empresa de seguridad privada, la de Villarejo, cuando no contaba con la autorización apropiada para llevar a acabo ese tipo de funciones en territorio nacional. Fainé replica que esa cuestión no era su competencia. Y Brufau recuerda que dio la orden general de atender a la situación que se abría con el movimiento de Sacyr, y que no le consta que se realizara ilegalidad.
Aviso Legal
Esta es la opinión de los internautas, no de diarioabierto.es
No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
Su direcciónn de e-mail no será publicada ni usada con fines publicitarios.