El mercado laboral español envejece dramáticamente: en 2030, habrá más de 8,7 millones de profesionales de 55 a 66 años. El colectivo sénior continuará ganado peso en la población en edad de trabajar (16-66): del 48% de 2021 a más del 50% en 2030, con lo que su peso en activos superará en 2030 el 50%. La oferta de trabajo sénior se desplaza a los grupos de 50 a 66 años, con mayores aumentos en mujeres. Y hay diferencias regionales notables: aumentos de activos sénior más elevados en Madrid, Levante, Cataluña y Andalucía, y caídas en el noroeste, noreste y centro del país. Se observan mayores incrementos en los niveles educativos más elevados, en particular en el colectivo de licenciados e ingenieros.

Estas son las principales conclusiones del Índice ManpowerGroup del mercado laboral Sénior (45-55 y 55-66 años, 2021-2030). Este estudio pone en evidencia que en España se precisa fomentar la formación continua, para poder hacer frente a una transformación digital de la economía ya imparable. “Necesitamos formación continua y eso es crítico para el talento sénior”, ha destacado al presentar el informe Raúl Grijalba, presidente de ManpowerGroup en España, Portugal, Grecia e Israel, pues es necesario ajustar la oferta laboral a la demanda de perfiles empresariales capacitados para la desarrollar la economía.

En definitiva, el empleo nuevo de la próxima década (2,6 millones) será ocupado por profesionales de 45 a 66 años, pero de formación alta. De no cambiar la tendencia, podrían quedarse sin cubrir hasta dos millones de empleos. En línea con la recuperación del empleo en España, el estudio anuncia la creación de posiciones nuevas en un porcentaje cercano al 1% anual, que alcanza el 2,8% anual para el colectivo de 45 a 66 años. Esto añadirá 2,6 millones de nuevos empleos, para los que se requerirá formación técnica (700.000) o licenciatura o ingeniería (800.000). Pese a todo, seguirán faltando activos de 45 a 66 años en el mercado laboral, por lo que entre 1,6 y 2,0 millones empleos podían quedar vacantes.

 

 

 

Según el mismo estudio de la consultora ManpowerGroup, para paliar el desajuste entre puestos de trabajo a cubrir de cara al año 2030 y profesionales disponibles, será necesario también fomentar entre esas personas el interés por la creación de empresas, invertir más en I+D y atraer talento internacional. Durante la presentación del estudio, Grijalba ha destacado: “El mercado laboral español vive una gran paradoja, también en el segmento de mayores de 45 y, específicamente, en el de 55 a 66 años: se crean posiciones y sigue habiendo un alto índice de desempleo, a la vez que faltan profesionales. La formación en habilidades y competencias es la clave para evitar alargar la situación: un país necesitado de inmigración para completar empleos en determinados sectores, regiones y cualificaciones, conviviendo con un porcentaje de profesionales desempleados tan insostenible en lo numérico, como en el coste social que conlleva”.

Por su parte, el profesor Josep Oliver, catedrático emérito de Economía Aplicada de la Universidad Autónoma de Barcelona, y autor del estudio, ha señalado: “La cohorte de 45 a 66 años absorberá una gran porción del mercado laboral español, con un 47% de la población en edad de trabajar (16-66 años), y el 50 % de los ocupados. Además, mostrará un sesgo todavía más marcado hacia niveles altos de formación, con mayores avances en profesionales y técnicos y empleados cualificados. Además, de no mediar un cambio muy sustancial de la actividad en los mayores de 60 años, y aun considerando un aumento modesto del empleo, en 2030 quedarían sin cubrir entre 1,6 y 2 millones de puestos de trabajo”.

Beatriz Blasco Marzal, presidenta de Multinacionales por Marca España, ha apuntado: “Las compañías globales importamos a España nuestras buenas prácticas. Somos además tractoras de talento nacional e internacional y grandes generadoras de empleo diverso y sostenible. Cabe recordar que las multinacionales extranjeras emplean a 1.700.000 personas de forma directa, y una cifra similar de manera indirecta”.

Soluciones posibles
Con un desempleo del 16% al término de 2020, un 39% de desempleo juvenil (menores de 25 años, según datos de Eurostat de marzo 2021), un desajuste entre la oferta y la demanda de trabajo superior al 60% (Talent Shortage 2021, ManpowerGroup), el mercado laboral español acumula cifras preocupantes, que los participantes en la presentación del índice han querido interpretar en su conjunto, y enunciar posibles soluciones, sin perder de vista el reto demográfico para este grupo de edad que, no hay que olvidar, convive con el de la cifra de desempleo juvenil (un 40% en menores de 25 años).

Grijalba ha propuesto medidas concretas: “Solo aunando esfuerzos podremos paliar los efectos del envejecimiento de los profesionales, a la vez que abrimos oportunidades para los jóvenes. El Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno ha de contemplar un plan de empleabilidad por sectores, con apartados específicos por grupos de edad. Además, es necesario garantizar la conectividad de todas las regiones y profesionales, y el desarrollo de sus competencias digitales; finalmente, es necesario también un compromiso de empresas e instituciones para incentivar la contratación, así como una actualización de habilidades y competencias de profesionales”.

Más información
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