¿Súper ministro y mini alcaldesa?

17/10/2011

diarioabierto.es.

Se parió la madre de todas las listas: la del Congreso. Habemus candidatos.  El PSOE que en este menester  -al igual que en la comunicación, en la manipulación del mensaje, en el alboroto colectivo y en el ataque contundente- suele ser más aplicado que su adversario, no esperó a salir de cuentas. Los populares sí: mantuvieron la incertidumbre hasta el último suspiro, alargando según qué casos, las dolorosas -y hasta agónicas- contracciones.  Atrás quedaron meses de intrigas palaciegas, cenáculos expectantes, bajadas de pantalones, traiciones consumadas, humillaciones vergonzantes, silencios bien administrados, puñaladas rastreras, amagos de síncopes y hasta inspiración para libretos de opereta.  Al final, unos entran, otros salen, unos ríen, otros lloran, unos ganan, otros pierden: la vida misma. En esta lid los golosos privilegios parlamentarios pasan a segundo plano: tanta puesta en escena, tanta parafernalia, tanta batalla y tanto berrinche se deben al ansia de poder palpable. Aunque el epicentro de la soberanía española -antaño guarida de talento y derroche de intelecto- ha trasmutado con la degeneración de nuestra democracia en nido contemporáneo de jetas, caraduras, advenedizos, inútiles, vagos, chorizos y maleantes.

El dichoso listado nos ha deparado pocas sorpresas y casi ninguna alegría: en un país carente de excelencia entre los llamados a gobernarnos, durante la próxima legislatura tampoco nos representarán los tipos más dignos, sabios, expertos o capaces. Volverán a hacerlo los habilidosos tejiendo encaje de bolillo en las organizaciones internas, los más serviles y complacientes a los intereses de sus siglas o los beneficiarios de pactos de despacho jamás desvelados ante la opinión pública. Algunos nombres dan risa, otros son para echarse a temblar y en mayor número del recomendable los hay que llevan calentando escaño desde el pleistoceno. Entre tanto guirigay, asoma el que mayor expectación mediática ha creado: el número cuatro por Madrid, demostración palpable de que la pasión -por un sueño- y la perseverancia -por conseguirlo- terminan por imponerse a la adversidad. Creyendo en uno mismo todo es posible: en la vida, lo que a veces intuimos como finales son benditos nuevos comienzos. Es innegable que el controvertido cuatro capitalino elevará el nivel intelectual en una política nacional carente de calidad, regalando debates de calado a oído y entendederas. Aun tratándose de una obviedad, abogo por un hemiciclo repleto de paradigmáticos -y hasta erráticos- albertos pero carente de paupérrimos pepiños, leires, bibianas, malenis y demás esperpentos impuestos por esas impúdicas listas cerradas. Un cuatro al que sus mismísimos detractores le reconocen capacidad para ocupar un puñado de carteras ministeriales tales como Interior, Defensa, Justicia o Fomento. O hasta una vicepresidencia. Privilegio reservado a los que poseen la extraña habilidad de simultanear múltiples vidas en una sola, de cultivar muchos hombres bajo una única identidad. ¿De cuántos cargos en activo afirmaríamos lo mismo? ¿De Ana Botella tal vez?  Es acusada de no ejercitar militancia, de su nulo conocimiento de las bases, de una incompatibilidad manifiesta con el electorado más moderado y centrista, de carencia de empatía con el votante más joven,  de su inexperiencia en la gestión de una administración de relevancia -siendo la alcaldía de Madrid la más significativa de España-,  de coleccionar meteduras de pata míticas en sus declaraciones, del presunto ordeno y mando de Aznar desde la sombra, de que ser consorte no debería equivaler a un salvoconducto exprés hacia el bastón de mando. Yo no afirmaré nada de esto, igual se nos destapa como magnífica alcaldesa mientras brujuleamos sobre hipótesis futuribles. Sólo apuntaré un pequeño detalle, por si acaso: carece de legitimidad porque ni se presentó como candidata ni pasó por el veredicto de las urnas madrileñas. Para mí en democracia el resultado de esas urnas es sagrado. ¿Y para ustedes?

Twitter: @CarmelaDf

¿Te ha parecido interesante?

(+13 puntos, 13 votos)

Cargando...

7 pensamientos en “¿Súper ministro y mini alcaldesa?

  1. muy bueno Carmela, suscribo en todo la primera parte y la última (horror de Botella en el ayuntamiento pero das en el clavo ni paso por urnas ni fue candidata). La parte central tengo mis dudas porque el number four me desagrada pero sin duda es incuestionable que su nivel intelectual y hasta politico esta muy superior de los moradores actuales del Congreso.

  2. Le doy la razón en que las listas son un fiasco. Renovación absoluta, las listas de Castilla la Mancha son para no ir votar, media de 60 años. Y todos repitiendo una y otra vez, los mismos caretos y la mayoría sin más actividad que la política en sus partidos, ¿pero cómo nos sacarán adelante los que solo se dedican a las intrigas para mantener los sillones? dan ganas de votar a ninguno son todos igual de malos.

  3. Lo de Botella es un fraude no la queremos de alcaldesa no lo merece no se lo ha ganado. Si Gallardón se va al gobierno de Rajoy a convocar nuevas elecciones municipales en Madrid.

  4. ALTAMENTE RECOMENDABLE!!!UN RAMILLETE DE VERDADES COMO PUÑOS…POR ESO SE AJUSTA ENORMEMENTE A LA REALIDAD. «Atrás quedaron meses de intrigas palaciegas, cenáculos expectantes, bajadas de pantalones, traiciones consumadas, humillaciones vergonzantes, silencios bien administrados, puñaladas rastreras, amagos de síncopes y hasta inspiración para libretos de opereta»…OS LO RECOMIENDO!!!

  5. Está usted acertadísima, pero es lo que tenemos.¿Cuándo se reformará la ley electoral? ¿ Conviene a los partidos mayoritarios (PSOE, PP) el cambio de la ley electoral? En cuanto a la señora Botella ¿Seguro que será alcaldesa de Madrid? Hay una afirmación colectiva sobre ello,pero yo disiento puesto que creo que hay personas más válidas que ella, y lo han demostrado, para ocupar dicho puesto.

    puesto.

  6. Articulazo. Con argumentos de peso y con reflexiones certeras. Botella nos la meterán con calzador pero los madrileños no la queremos, las listas serán infames mientras nos la sigan imponiendo y más galladornes y menos piltrafas y la legitimidad en democracia la seguirá dando las urnas, sino, apaga y vámonos.

Aviso Legal
Esta es la opinión de los internautas, no de diarioabierto.es
No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
Su direcciónn de e-mail no será publicada ni usada con fines publicitarios.