Las previsiones alcistas de la demanda se unen a los conflictos geopolíticos entre Rusia y Europa empujan el precio de las materias primas energéticas, desde el petróleo al gas natural. El Brent, referente en Europa, cotiza por encima de los 87 dólares el barril, y el West Texas, de EE UU, en los 85 dólares. El petróleo europeo cotiza a un precio similar al que alcanzó en 2014.

En este escenario, la Organización de los Países Exportadores de Petróleo (OPEP) ha señalado que mantiene sin cambios las previsiones de demanda mundial de petróleo para 2022, que fija un crecimiento de la demanda en 4,15 millones de barriles diarios. En su informe mensual, el cártel petrolero no parece temer el efecto del Ómicron en la economía y en el transporte, como ya muestra en la demanda de los países asiáticos. .

Pese a que la nueva variante del coronavirus puede tener un impacto en el primer semestre de 2022 «por los crecientes niveles de hospitalización que afectan a la mano de obra, las proyecciones de crecimiento económico siguen siendo sólidas», añaden.