La presidenta de la Fundación CNSE, Concha Díaz, recibe el premio de manos de la directora de la Agencia Española de Protección de Datos, Belén Cardona.

La Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) ha reconocido a la Fundación CNSE para la Supresión de las Barreras de Comunicación por su ‘proactividad y buenas prácticas’ al hacer accesible a las personas sordas la legislación existente en materia de protección de datos.

“Se trata de un tema con una especial complejidad, tanto si eres persona sorda como si no”, ha explicado la presidenta de la Fundación CNSE, Concha Díaz. “Son muchas las normativas que necesitan ser accesibles para poder ser comprendidas y consideramos que el Reglamento General de Protección de Datos no solo es una de ellas, sino que además es urgente darla a conocer entre la población sorda”.

En este sentido, la entidad ha creado una página web en lengua de signos española y texto escrito con toda la información relativa a los derechos y obligaciones que tanto dicho Reglamento, como la Ley Orgánica de Protección de Datos Personales y Garantía de los Derechos Digitales, confieren a la ciudadanía. Entre ellos, los derechos de acceso, rectificación, oposición, supresión, limitación del tratamiento y portabilidad; el derecho a no ser objeto de decisiones individualizadas; y el derecho al honor e intimidad personal y familiar.

La web incorpora secciones específicas sobre Internet y redes sociales, publicidad no deseada, derechos de las y los pacientes, o violencia digital, y un apartado que detalla cómo hay que actuar en caso de vernos afectados por algún delito o infracción. Para su ejecución, la Fundación CNSE ha contado con la financiación de la Fundación ONCE.

“El acceso a la información y a la comunicación es un requisito básico para que las personas sordas puedan ejercer sus derechos y obligaciones”, ha manifestado Concha Díaz tras recoger el galardón. “El reconocimiento por parte de la Agencia Española de Protección de Datos a esta iniciativa nos impulsa a seguir trabajando para garantizar que ninguna persona sorda se quede atrás”.