La adquisición de 50 aviones representa un gran impulso para el fabricante de Estados Unidos que le permite tener operativas a plena ocupación su plantas durante dos años, según ha manifestado el director ejecutivo, Dave Calhoun, durante la firma del contrato. Su valor sería superior a los 30.000 millones de dólares y representa una gran impulso a su estrategia de crecer en el área de transporte de carga que presenta una evolución muy positiva.

Por el contrario, el acuerdo entre Boeing y Qatar, que ha contado con el respaldo de la Administración Biden, es un revés para la compañía con sede en la ciudad francesa de Toulouse, en la que participa Francia, Alemania y España. Airbus lanzó en 2021 una nueva versión de su aparato de carga de A350.

El pedido de Qatar Cargo, como muestra del discurso oficial es una muestra de «las sólidas relaciones comerciales entre las dos naciones, y se produce después de meses de conflictos con Airbus. La compañía europea optó por cancelar un pedido de 50 A321neo después que la empresa compradora señalase que los aviones europeos eran defectuosos, a lo que el constructor respondió que los problemas eran solo de pintura, es decir, estéticos. El conflicto ha pasado al ámbito de los tribunales internacionales.