El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha pedido en su intervención ante los líderes del G-20 un plan de crecimiento para reactivar la economía mundial que esté liderado por los países con superávit comercial, como Alemania o China, según han informado fuentes gubernamentales.

Zapatero ha admitido que las reformas, los ajustes y la consolidación fiscal que están llevando a cabo los países endeudados son necesarios para combatir la crisis de deuda. Pero ha defendido que estos esfuerzos deben completarse con medidas para estimular el crecimiento a cargo de aquellos Estados que disponen de margen de maniobra presupuestario.

«Los países con superávit comercial deben tirar de la economía», ha defendido Zapatero en su discurso a puerta cerrada.

El presidente del Gobierno ha intervenido justo después del primer ministro británico, David Cameron, y ello le ha llevado a establecer un paralelismo entre la situación de los dos países. En su opinión, el motivo por el que España paga una prima de riesgo más alta que Reino Unido, pese a tener un nivel de déficit y deuda inferior, es porque el Banco de Inglaterra tiene la capacidad de comprar bonos de forma ilimitada y ya posee el 20% en cartera.

En contraste, el Banco Central Europeo (BCE) no actúa de la misma manera con los países de la eurozona y está comprando mucha menos deuda, ha resaltado Zapatero.

El presidente del Gobierno ha defendido la necesidad de un acuerdo entre las fuerzas políticas griegas que permita aplicar las reformas pactadas con la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI) a cambio del rescate. Pero ha reclamado al G-20 que envíe un «mensaje de esperanza» y «alivio» a los ciudadanos griegos.

Durante la foto de familia del G-20, Zapatero ha intercambiado un «saludo afectuoso» con el presidente estadounidense, Barack Obama, y ha conversado brevemente con el presidente mexicano, Felipe Calderón, y con el secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, según las fuentes.