Más de una decena de entidades y personas especialistas en la protección de los derechos de las personas en el espacio digital se han unido a Acción por la Justicia Algorítmica (AxJA). Su intención es poner coto a la falta de control democrático y de transparencia en el uso de herramientas tecnológicas, como la implementación de sistemas de inteligencia artificial (IA) y de toma de decisiones automatizadas, así como velar por la rendición de cuentas a las entidades pertinentes.

AxJA desafiará las malas prácticas con medios legales y de reparación. Colaborará con instituciones públicas para reforzar la ley de privacidad y de protección de datos, y con entidades del sector privado, para mejorar los estándares de desarrollo y uso de las nuevas tecnologías. Los promotores de AxJA son la Fundación Éticas —auditora de algoritmos y sistemas de IA cuyo propósito es proteger a las personas en entornos tecnológicos— y la Fundación Maldita.es, un medio de comunicación sin ánimo de lucro cuya misión es dotar a los ciudadanos de herramientas e información para que puedan tomar decisiones.

En AxJA están involucradas también personas que trabajan en la protección de los derechos en el entorno digital. Igualmente, ha suscrito alianzas con una decena de asociaciones españolas e internacionales que velan por un uso respetuoso y transparente de la tecnología. En España forman parte de la coalición miembros como Digital Fems, Gender Justice Lab, Irídia, Xnet, Interferencias y Huxir. A escala internacional AxJA cuenta con el respaldo de Digital Freedom Fund, Panoptykon Foundation y Fundación Karisma.

Estas entidades harán un seguimiento a las campañas y proyectos ya previstos. Y se reunirán periódicamente para identificar los desafíos más relevantes y valorar las acciones estratégicas que permitan mejorar los estándares de desarrollo y uso de las nuevas tecnologías.

Cookies y partidos políticos
AxJA dará visibilidad al uso de las cookies en las webs de los partidos políticos con representación parlamentaria en España, para hacer un llamamiento al uso responsable, transparente y democrático de estos mini-programas capaces de recoger datos de los usuarios sin su conocimiento ni control. La campaña se centra en los partidos políticos para poner el foco en la falta de buenas prácticas incluso entre aquellos que tienen el deber de promoverlas, y se enfoca en las cookies porqué recientes decisiones legales en Europa han puesto sobre la mesa su extendido uso de formas no legales, incluso en España.

El mensaje principal que AxJa quiere mandar es que la legislación actual permite que las cookies funcionales no requieren consentimiento, de forma que la ciudadanía debería desconfiar siempre de las pantallas de aceptación de cookies: quién recoge sólo los datos estrictamente necesarios para el funcionamiento de una página web no necesita consentimiento explícito. Quien lo pide, está buscando un uso comercial o publicitario que el usuario debería poder rechazar con la misma facilidad que puede aceptar.

El análisis se ha hecho de manera pública a través de la extensión privacy badger de la Electronic Frontier Foundation, que bloquea automáticamente las cookies y arroja el número y qué tipo de rastreadores han sido bloqueados. El estudio revela que estos partidos utilizan de media 7,5 rastreadores en sus páginas web y desvela otras malas prácticas sobre la configuración de esta tecnología.

‘Soy mayor, no idiota’
La creciente brecha digital promovida por la implementación de soluciones digitales para la prestación de servicios dio lugar a la campaña Soy mayor, no idiota. AxJA se centrará en abordar los casos de brecha digital promovidos y auspiciados por las Administraciones públicas, que eliminan la atención personal o telefónica para imponer soluciones digitales para procesos tan importantes como utilizar el transporte público o acceder a cursos y servicios.

En el caso del reconocimiento facial, AxJA pedirá explicaciones a aquellos organismos y empresas que apuesten por estas herramientas en un momento en el que en la UE se plantea su posible ilegalización. Concretamente, se está trabajando en el uso de estos sistemas en entornos aeroportuarios y educativos.

Gemma Galdon Clavell, fundadora de Fundación Eticas, advierte: “A menudo vemos cómo los grandes compromisos con las buenas prácticas tecnológicas no consiguen convertirse en prácticas. A pesar de las buenas intenciones, la tecnología actual está generando discriminaciones, exclusiones e injusticias. AxJA pretende subir el precio de hacer las cosas mal. Y añade Galdon: “Observamos además altísimos niveles de incumplimiento de la legislación de protección de datos y de IA. En AxJA queremos usar herramientas legales existentes para denunciar malas prácticas y premiar a aquellos que se esfuerzan en desarrollar e implementar tecnologías responsables!.

La dinamizadora de la coalición AxJ, Mireia de Orra, subraya: “La coalición está teniendo una acogida entusiasta, tanto por parte de grupos de defensa de derechos digitales como de otras organizaciones tradicionales de la sociedad civil que ven, a veces con impotencia, cómo la tecnología les impacta de forma negativa y no tienen herramientas para defenderse. AxJa quiere ser esa herramienta”.

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