“No todo lo que es legal es justo” es el manifiesto que el Col.legi de Periodistes ha hecho público para respaldar a los profesionales de los medios públicos catalanes por las limitaciones profesionales que sufren durante la campaña y que convierten la información política en publicidad . Se repite una protesta que se inició en el año 2003. Los periodistas de TV3 y Catalunya Ràdio –cuyos informativos son líderes en audiencia-  advierten antes de la información electoral que en la elaboración de estas noticias no priman los criterios profesionales, si no las imposiciones de la Junta Electoral que condiciona el orden de aparición y el minutaje que se ha de dar a cada formación.  Y ello implica que la información electoral la hagan “no en función de la importancia de la noticia sino de la representación obtenida en las elecciones anteriores”. Como protesta los periodistas no sólo firman las informaciones si no que explican las razones por qué no lo hacen antes de dar paso a las crónicas electorales..

Por otra parte los partidos han dado una vuelta de tuerca a las limitaciones informativas, ofreciendo la señal editada de la mayoría de sus mítines y limitando al máximo las preguntas en las ruedas de prensa. Como denunció la directora de TV3, Mònica Terribas, esta s limitaciones a las cadenas públicas en época electoral se va extendiendo con presiones para que la política de “bloques” se extienda durante todo el año. Los periodistas denuncian en el manifiesto que “la Junta Electoral, con una extraña interpretación, equirara los espacios gratuitos de propaganda política a la información electoral”, en una anomalía “única en Europa” que consideran que es ”una vigilancia de excepción durante los quince días de campaña” y consideran que la imposición de los bloques “afecta la columna la columna vertebral del sistema democrático”.

Los partidos mayoritarios, en las sesiones de control parlamentario a los medios públicos, se han quejado reiteradamente de la huelga de firmas de los periodistas asegurando que con su actitud favorecen la abstención, sin embargo se han opuesto a cualquier modificación de la interpretación que hace el Tribunal Supremo de la Ley Electoral y no han permitido –con sus recursos a la Junta Electoral- ninguna flexibilización de la normativa. En vano han sido las peticiones tanto del Sindic de Greuges (defensor del pueblo catalán) como del Consell de l´Audiovisual (Consejo del Audiovisual) de que se llegara a un pacto. Cuando buscaron acuerdos para que el minutaje no se computara en cada informativo si no en periodos más amplios no han fructificado ante los recursos de los partidos ante la Junta Electoral. Cabe destacar que este organismo no actúa de oficio, si no que sólo entiende de las denuncias que le presentan.