La Abogacía española ha reclamado, con motivo de las XXX Jornadas de Extranjería, un mayor esfuerzo de solidaridad ante el aumento exponencial de víctimas de conflictos bélicos y regímenes autoritarios. También reivindica la igualdad de derechos de todos los migrantes, su compromiso con el apoyo jurídico a todos ellos.

“En estos trágicos momentos de la historia de la humanidad, donde las guerras en vez de desaparecer se incrementan brutalmente, la Abogacía Española denuncia todas las violaciones de los Derechos Humanos allá donde se produzcan y apoya jurídicamente a todos los grupos vulnerables reafirmando su compromiso con el derecho humano a la paz y su solidaridad con las víctimas”, afirma la declaración aprobada en las XXX Jornadas de Extranjería, celebradas en Granada.

Durante dos días abogados de extranjería de toda España se han reunido, bajo el lema “Distintos orígenes, mismas jornadas”. Los  letrados han analizado la situación de Ucrania, pero también se han escuchado testimonios sobre Afganistán, Cuba, Venezuela y Nicaragua.

“El reconocimiento y la comprensión de todos esos entornos de violación de derechos humanos son fundamentales para los Abogados y para toda la sociedad, porque nos permiten visualizar el verdadero alcance del trabajo de la extranjería y de la protección internacional, y de la absoluta necesidad de solidaridad con todas ellas”, insiste la declaración, que recuerda que “la desigualdad económica global, la criminalidad transnacional, los regímenes autoritarios y la guerra son causas de las migraciones forzadas y de la búsqueda de asilo y refugio en el mundo”.

En las jornadas se pidió a los letrados que colaboren con el mecanismo de recogida de pruebas de crímenes de guerra cometidos por Rusia puesto en marcha por el Consejo General de la Abogacía para remitirlas a la Corte Penal Internacional. “Supone una contribución de la Abogacía a la defensa del derecho internacional humanitario”, resaltala declaración, leída por Blas Jesus Imbroda, presidente de la subcomisión de Extranjería del Consejo.

En el último día de estas jornadas se analizó el reglamento de extranjería, poniendo de manifiesto los fallos del sistema, como la inaceptable lentitud en la tramitación de los expedientes. “Defrauda todas las expectativas y es irrespetuoso para el ciudadano extranjero”, afirmo Santiago Yerga, director general de Migraciones.

El magistrado del TSJ de Castilla La Mancha, Jaime Lozano, habló de “situación de derribo” y pidió una ley de extranjería que incorpore las directivas europeas.