Se trata de la respuesta comunitaria al intento de atacar a organizaciones multilaterales e instituciones como el Bundestag y los conocidos públicamente como ‘WannaCry’.

Gracias a estar herramienta, los Veintisiete pueden imponer sanciones para impedir, disuadir y responder a las actividades informáticas malintencionadas dirigidas contra la UE o sus Estados miembros.

Aunque la lista se revisará cada 12 meses, con esta decisión de extender tres años el marco de sanciones, la UE «muestra el fuerte compromiso de mejorar su resiliencia y capacidad para prevenir, desalentar, disuadir y responder a las amenazas cibernéticas», ha informado el Consejo de la Unión Europea.

El marco de sanciones se remonta a 2019, cuando la UE estableció este instrumento para responder a la oleada de ciberataques, incluido el que sufrió el Bundestag en 2015 y por el que los Veintisiete castigan a dos altos cargos rusos y una entidad rusa.