La cifra de negocio cayó un 6,4% entre los pasados meses de enero y septiembre, hasta sumar 227,6 millones de euros, en tanto que el beneficio bruto de explotación (Ebitda) se situó en 140 millones, un 15,2% más.

La compañía que preside Ignacio Bayón obtuvo la mayor parte de sus ingresos de la división de alquiler de patrimonio y la venta de activos.

Por contra, la rama de promoción y venta de viviendas cayó un 46,6% en los tres primeros trimestres, hasta 43,1 millones de euros. La inmobiliaria constata que en los últimos meses se ha ralentizado el ritmo de venta de pisos por la «importante restricción del crédito y la reducción del ‘stock’ durante 2009 y 2010».

Stock

En los nueve primeros meses del año Realia prevendió 146 viviendas, un 61% menos que un año antes. Así, a cierre de septiembre, la inmobiliaria contaba con una cartera de 1.049 pisos (622 de ellos terminados) de las que 111 están vendidos y pendientes de entrega y otros 938, actualmente a la venta.

En cuanto a la rama de alquiler de promoción, se mantiene como primera fuente de ingresos, con 133,1 millones de euros, un 2,2% más. Además, la inmobiliaria obtuvo otros 49,1 millones de la venta de activos y suelo.

En concreto, en los nueve primeros meses, en el marco de su estrategia de rotación de activos, vendió inmuebles por 80,5 millones de euros, que generaron unas plusvalías de 43,8 millones de euros.

Realia destinó gran parte de estos recursos a amortizar anticipadamente deuda, concretamente, los vencimientos previstos entre 2011 y 2014, con lo que la compañía queda libre de plazos de pago de deuda hasta 2015. A cierre de septiembre, sumaba un endeudamiento financiero neto de 2.153 millones de euros.