El portavoz de Más País-Equo en el Congreso, Íñigo Errejón, ha sido galardonado con el Premio ‘Emilio Castelar’ al mejor orador del Parlamento de 2021, que fue entregado este martes en el curso de la cena anual de la Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP).

En las votaciones entre los periodistas, Errejón se impuso al ministro de Cultura, Miquel Iceta; a la presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas; y al portavoz de Esquerra, Gabriel Rufián.

La Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP) recupera así sus tradicionales premios anuales tras un paréntesis de dos años motivados en 2019 por la celebración de elecciones y en 2020 por la pandemia del coronavirus. Eso sí, los galardones iban a entregarse el pasado mes de diciembre, pero una de la última oleada de coronavius obligó a posponer la cita a este mes de junio.

Los últimos premios datan de 2018 y el galardón al mejor orador fue a parar a manos de la diputada de Coalición Canaria (CC), Ana Oramas. Un año antes, en 2017, la ‘estatuilla’ se la había quedado el portavoz parlamentario del PNV, Aitor Esteban.

Casado recibe un último premio

Como ‘Azote del Gobierno’ los informadores premiaron a Pablo Casado, ya que las votaciones se realizaron meses antes de que fuera descabalgado del liderazgo del PP y sustituido por Alberto Núñez Feijóo. El ya exdiputado no acudió a recogerlo y en su nombre subió su portavoz en el Senado, Javier Maroto.

En el lado contrario, la vicepresidenta Yolanda Díaz, de Unidas Podemos, fue distinguida como ‘Azote de la Oposición’, imponiéndose a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero (PSOE); la exportavoz de PSOE en el Congreso, Adriana Lastra; y el diputado de Bildu Oskar Matute. En 2018, este premio fue para la exvicepresidenta primera Carmen Calvo, ahora fuera del Gobierno.

Por su parte, la socialista Laura Berja, portavoz de Igualdad del PSOE, fue distinguida como la Revelación de 2021 en el Congreso, un premio al que también aspiraban Marga Prohens (PP), Marta Rosique (ERC) y Mireia Vehí (CUP), y que hace tres años obtuvo la ahora ministra Ione Belarra.

Premios ‘Naranja y limón’

Para el premio a la ‘Mejor Relación con la Prensa’ hubo un empate en las votaciones y el galardón recayó ‘ex aequo’ en el exministro de Transportes y diputado del PSOE, José Luis Ábalos, y la portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Cuca Gamarra. «No sé si se están pidiendo pactos de Estado», comentó la actual secretaria general del PP.

Por el contrario, el ‘Castigo para la Prensa’ recayó en la hasta ahora secretaria general de Vox en la Cámara Baja, Macarena Olona, candidata en las elecciones andaluzas del día 19, que no estuvo en la ceremonia, como tampoco nadie de la dirección de su partido.

El portavoz de Ciudadanos, Edmundo Bal, fue distinguido como el ‘Parlamentario más activo’, un galardón que en la anterior edición obtuvo Yolanda Díaz, mientras que el independentista Gabriel Rufián recibió el premio ‘Parlamentario 2.0’, que distingue a los más duchos en las redes sociales.

El premio al ‘Senador del Año’ fue para Josep Lluís Cleries, de Junts, y la distinción al ‘Senador Revelación’ la logró Pablo Gómez Perpinyá, de Más Madrid. Por su parte, Eugenia Rodríguez-Palop, de Unidas Podemos, fue galardonada a su vez como mejor eurodiputada del año, pero no estuvo en la cena y el galardón lo recogió Txema Guijarro, secretario general del grupo confederal en la Cámara baja.

La ceremonia fue clausurada por la presidenta del Congreso, la socialista Meritxell Batet, que en su discurso vivió personalmente los constantes murmullos que sufren los diputados cuando están en la tribuna del hemiciclo. Incluso pidió amparo a la presidenta de la APP, la periodista Anabel Díaz.

Batet recordó que tras las elecciones de 2019, primero las de abril y luego las de noviembre, la cámara baja se renovó casi completamente y más de la mitad de sus integrantes parecen estar «el primero de Parlamento». A su juicio, ser diputado de tu país debería dar densidad, pero en ocasiones ella se siente rodeada de «la insoportable levedad del ser».

Coherente con sus discursos, Batet ‘cogió el guante’ de Gamarra y apostó por pactos de Estado entre PSOE y PP, un llamamientos que recibió abucheos desde las mesas de Unidas Podemos y de los partidos independentistas.