El Ibex 35 ha subido un leve 0,81% al cierre de sesión, pero ha logrado recuperar los 8.300 puntos (8.304 enteros) y así esquivar la influencia de la creciente presión sobre la deuda pública de los países de la eurozona, que ha llevado a la prima de riesgo española a marcar un nuevo máximo por encima de los 460 puntos básicos.

Santander y BBVA empujaron al selectivo con sendas subidas del 1,78%, a lo que también contribuyó Telefónica, que repuntó también más que el Ibex (+1,03%). Repsol (+0,71%) e Iberdrola (+0,15%) crecieron menos, pero aun así lograron evitar el terreno negativo.

Las mayores subidas las protagonizaron Abengoa (+6,14%), Mapfre (+3,27%) y OHL (+2,88%), en tanto que las mayores caídas se las anotaron los títulos de Mediaset (-4,11%), Bankia (-1,71%) e IAG (-1,59%).

La presión sobre los mercados de deuda pública volvió a marcar la jornada, pues el diferencial de Italia llegó a tocar los 526 puntos básicos y el de Francia, segunda economía de la eurozona, lo hizo hasta los 190 puntos.

Aún así, el Mib de Italia y el Cac parisino salvaron el rojo, con subidas del 0,8% y del 0,7%, respectivamente. El Dax de Francfort y el PSI-20 de Portugal cedieron un 0,2%, mientras que las pérdidas en el Footsie de Londres se quedaron en el 0,1%.

En el mercado de divisas, el euro logró recuperar posiciones respecto al billete verde y al cierre de jornada en el Viejo Continente establecía su cambio respecto al dólar en 1,3505 unidades.

«El mercado está descolocado», declaró la estratega de IG Markets Soledad Pellón para resumir la jornada de «vaivenes» de hoy. Y es que la intervención del BCE en el mercado de deuda pública consiguió mitigar las pérdidas iniciales en las Bolsas, aunque luego rumores como la petición de Unicredit de más financiación amagaron con dar la vuelta al Ibex.

Más tensiones por la subasta de mañana

De cara a la subasta de obligaciones que encara el Tesoro público mañana jueves, Pellón vaticinó un «nuevo día de tensiones» y lamentó la «mala suerte» de España en tener programadas dos subastas en medio de las turbulencias que están sufriendo los mercados.

En este sentido, anticipó una colocación de deuda a largo plazo más cara, como ya ocurriera con la emisión de letras del pasado martes, cuando el Tesoro pagó más de un 5% de interés, cupón que la analista prevé «muy difícil» rebajar mañana.