Deutsche Telekom registró un beneficio neto atribuido de 5.409 millones de euros en el primer semestre de 2022, lo que supone mejorar en un 92,1% el resultado contabilizado en el mismo periodo del año pasado, informó la ‘teleco’ germana, que ha revisado al alza sus previsiones anuales.

Las cuentas semestrales de la compañía alemana reflejan el impacto positivo en los tres primeros meses del ejercicio de la venta del 50% de FTTH GlasfaserPlus a IFM, así como la de T-Mobile Netherlands. De este modo, el beneficio neto ajustado de Deutsche Telekom aumentó un 41,3% en la primera mitad de 2022, hasta los 4.683 millones de euros.

Los ingresos netos de la operadora alemana hasta junio se elevaron un 6% interanual, hasta 56.191 millones de euros, incluyendo una mejora del 10,4% de los ingresos por servicios, que sumaron 45.178 millones de euros.

Los ingresos de la operadora en Alemania aumentaron un 1,8% en el semestre, hasta 12.059 millones, y un 10,7% en Estados Unidos, hasta 36.673 millones, mientras que en el resto de Europa disminuyeron un 1,8%, hasta 5.451 millones.

Entre abril y junio, Deutsche Telekom registró un beneficio neto atribuido de 1.460 millones de euros, un 22,3% menos que un año antes, como consecuencia de mayores gastos por la integración de Sprint en los Estados Unidos. De este modo, el beneficio neto ajustado en el trimestre fue de 2.445 millones, un 15,7% más.

De su lado, la cifra neta de negocios de Deutsche Telekom en el segundo trimestre alcanzó los 28.168 millones de euros, un 5,9% más que un año antes, incluyendo un incremento interanual del 10,8% de los ingresos por servicios, hasta 22.891 millones.

«Seguimos creciendo, a pesar del difícil entorno económico», dijo Tim Höttges, presidente del consejo de administración de Deutsche Telekom. «Estamos bien encaminados este año para cumplir con nuestros ambiciosos objetivos. Nuestras inversiones están dando sus frutos», añadió.

En este sentido, la compañía ha revisado al alza sus previsiones anuales y ahora espera que su resultado bruto de explotación tras alquileres (Ebitda AL) ajustado alcance alrededor de 37.000 millones de euros, por encima los 36.600 millones de la anterior estimación debido al desarrollo positivo del negocio en T-Mobile US como al sólido desempeño fuera de los Estados Unidos.