Los precios del gas natural marcan récords tanto en el mercado estadounidense como en el europeo. A la estrategia que se sigue por diversos países, y no solo europeos, de elevar las reservas de gas de cara al invierno se ha unido la sequía que asola Europa. La falta de agua, que además eleva los precios de las materias primas agrícolas, impacta en la producción de electricidad: se reduce la hidroeléctrica y aumenta el uso de los ciclos combinados que utilizan el gas como combustible.

Los futuros del gas natural de EEUU se negocian en el entorno de los 9,4 dólares por millón de unidades térmicas británicas, cifra que está cercana a la alcanzada hace 14 años. Aumenta el precio en el mes y la subida interanual es superior al 140%.Crece la demanda nacional e internacional impulsada por las tensiones geopolíticas en el este de Europa, a las que se ha sumado la crisis con China por Taiwán. Mientras, la entidad Freeport LNG ha acordado con los operadores la apertura parcial de la planta de Texas en octubre, que está centrada en las exportaciones.

En Europa, las cotizaciones en el mercado neerlandés para entrega del gas en los próximos meses se mueven entre los 239 a 243 euros por megavatio-hora, lo que implica que los récords sigan al alza. Llenar los tanques e infraestructuras subterráneas es una de las guías prioritarias de la política energética de Alemania, Italia, Reino Unido y otras naciones europeas, al tiempo que se ahonda en la política de ahorro (el Gobierno de Berlín va implementar una nueva tasa para productos energéticos).

La diversificación es otro de los objetivos tanto en Europa como en Asia. En la cumbre hispano-alemana que está programada para octubre la construcción del gasoducto entre España y Francia, por Cataluña, va a ser una tema estrella. Scholz y Sánchez van a presionar en Bruselas para que se consolide como un proyecto prioritario con financiación comunitaria y que serviría para duplicar las exportaciones de gas desde España. Las conexiones que ya existen, por Navarra y el País Vasco, están ahora operativas al 100%.

Mientras, el petróleo cotiza a la baja y el Brent se comercializa en los 93 dólares el barril. Además del temor de que la recesión pase factura a la demanda, que se debilitaría, Irán está más cerca de entrar sin trabas en los mercados internacionales si se cierra el acuerdo sobre el armamento nuclear.