El Congreso de los Diputados convalidará mañana jueves los cambios en la cotización de los autónomos a la Seguridad Social. A partir de enero, dejarán de elegir libremente su cuota y cotizarán en función de sus ingresos reales. Unos 650.000 autónomos verán subir su cuota mensual, hasta los 500 euros, en los tramos más altos, durante el período transitorio. A cambio el sistema les ofrecerá mejores pensiones y prestaciones.

El PP confirmó hoy miércoles su intención de votar a favor de la convalidación del real decreto ley aprobado el 26 de julio por el Consejo de Ministros. Un apoyo el de los ‘populares’ que basta para dar luz verde a los cambios en el sistema de cotización de los autónomos.

Hasta ahora estos trabajadores elegían libremente su base de cotización. Sin embargo, a partir de enero, y por un período transitorio de 9 años, aunque deberá revisarse ya en 2025, los autónomos deberán cotizar en función de sus ingresos reales.

El cambio significa que el 20% de los autónomos verán subir sus cotizaciones a la Seguridad Social; mientras que el 80% restante pagará lo mismo que ahora o menos, según cálculos de ATA, la principal organización del sector, desde donde comunicaron hoy el voto favorable del PP en la votación en el Pleno del Congreso mañana jueves.

Cálculo de los rendimientos netos

La cotización se calculará de acuerdo a los rendimientos netos mensuales. Si un autónomo ingresa 900 euros al mes y soporta unos gastos de 185 euros en ese período, sus rendimientos netos quedarán fijados en la diferencia, es decir, 715 euros. A ese cantidad el autónomo podrá aún restar un 7% adicional, en concepto de gastos de difícil justificación. De este modo sus rendimientos netos finales ascenderían a 664,95 euros (en el caso de los autónomos societarios, esta reducción se limita al 3%).

En este caso, el autónomo deberá pagar una cuota de 230 euros; cantidad que rebaja en más de 60 euros el mínimo actual.

Se mantiene la tarifa plana

El nuevo sistema establece una tabla de 15 tramos en función de los ingresos de los autónomos. Y ofrece a los trabajadores la posibilidad de variar hasta seis veces al año su cuota de cotización, según marche el negocio.

Además, la nueva norma mantiene la llamada tarifa plana o reducción de cuota a los autónomos que den sus primeros pasos en el negocio. Sin embargo, se elevan de 60 a 80 euros la cuota a pagar durante el primer año de actividad. Y, a partir de ahí, los descuentos se reservan para aquellos que no superen el umbral del salario mínimo interprofesional SMI; es decir, 14.000 euros anuales.

Dos de las principales asociaciones de autónomos —ATA y UPTA— han mostrado su satisfacción por el previsible respaldo mañana en el Congreso al nuevo sistema.

Sin embargo, la Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos ha mostrado su oposición y ha alertado de que la modificación reducirá las prestaciones de los autónomos con menos ingresos, hasta un 30% en el peor de los casos.

Por su parte, Ciudadanos, el grupo político que avanzó su voto en contra, advierte que el sistema de tramos le parece “injusto y no progresivo” al obligar a cotizar en mucha mayor proporción a los autónomos con menores ingresos.