Solaria obtuvo un beneficio neto de 43,7 millones€ en el primer semestre del año, lo que representa un incremento del 85% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. La cifra de ingresos del grupo de renovables alcanzó los 75,4 millones, con un crecimiento del 52%, y el resultado bruto de explotación (Ebitda) aumentó un 61%, hasta los 68,1 millones.

Este incremento ratifica su plan de negocio, basado en una mayor producción de energía debido a las nuevas plantas conectadas a finales de 2021 y principios de 2022, y en una optimización de gastos.

Solaria ha aumentado casi 300 megavatios (MW) este año, llegando a los 1.000 MW en operación, a los que se añaden los 1.034 MW en construcción en los cinco países en los que está presente.

El grupo presidido por Enrique Díaz-Tejeiro ya tiene visibilidad sobre 14 gigavatios (GW) para alcanzar el objetivo de 18 GW en 2030.

En línea con la puesta en marcha de nuevas instalaciones, la producción de energía de Solaria creció un 50%, pasando de 430 gigavatios hora (GWh) a 641,7 GWh.

En lo que se refiere a su expansión internacional, en Italia cuenta ya con un ‘pipeline’ de 2 GW y en Alemania está avanzando en la contratación de equipo local.

Díaz-Tejeiro afirmó que llegar al gigavatio conectado supone «un gran hito para nuestra compañía». «Durante esta primera mitad del año hemos vivido una situación geopolítica en Europa que ha puesto a las renovables en el centro del debate y que, sin duda, impulsará su desarrollo. Los excelentes resultados de este primer semestre y las buenas perspectivas de la segunda mitad del año permitirán a Solaria cumplir su hoja de ruta para 2030», dijo.