El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, interviene en el Senado (Fotografía de Alejandro Martínez Vélez / Europa Press).

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, admite en el Senado que los próximos meses «no van a ser fáciles», pero asegura que no se adoptarán medidas drásticas y a ningún hogar español le va a faltar energía «para calentarse, para iluminarse y para cocinar este invierno».

«No va a haber apagones, ni racionamientos ni ninguna de esas escenas apocalípticas que pronostican los creadores de bulos», afirma durante su comparecencia, a petición propia, en el Senado.

Reconoce que los precios siguen estando muy altos, pero también destaca que España es el país de la Unión Europea «que más ha reducido su inflación en el último mes».

Pese a esto, el presidente opta por no «edulcorar la situación y esconder su gravedad». «Sabemos que el alto coste de la vida no va a desaparecer de la noche a la mañana. Es más, puede que se produzcan retrocesos durante el invierno», aludiendo al impacto que tendría una decisión de Putin de cerrar definitivamente todos los gaseoductos a Europa.

El Gobierno va a seguir tomando todas las medidas adicionales que sean precisas y se pondrán «todos los recursos» para proteger a los ciudadanos.

Bancos y energéticas deben devolver a la sociedad las ayudas de la pandemia

Pedro Sánchez resalta la necesidad de «corresponsabilidad fiscal» y que bancos y energéticas tienen el «deber moral» de devolver ahora a la sociedad lo que recibieron durante la pandemia como resultado de la actuación del Gobierno, con 30.000 millones en ayudas a las empresas.

Ahora, «la lección tiene que ser la misma, la respuesta tiene que ser la misma, la línea adecuada es la corresponsabilidad fiscal».

«Una parte del sector privado» que se está beneficiando «de manera extraordinaria» de los efectos de la guerra, entre los que ha citado expresamente a bancos y energéticas, «tienen ahora el deber moral de devolver a la sociedad en momentos de dificultad una parte de lo que recibieron durante la pandemia».

En el contexto actual «no es razonable que se establezca una suerte de disputa fiscal indiscriminada a la baja que a la postre lo que va a hacer es debilitar lo que con tanto esfuerzo hemos fortalecido, nuestro Estado del bienestar»,. Y recuerda que la gestión de la pandemia «fue el mayor ejercicio de cogobernanza de la historia».