Las compañías nacionales también han considerado prioritario fortalecer su liquidez y flujo de caja (76%) e invertir en la digitalización de los procesos administrativos (74%).

La mejora de la gestión de deuda (73%) y la optimización de los procesos de pago para garantizar que los proveedores reciban el abono de sus facturas en fecha (72%) también han figurado entre las líneas estratégicas de la mayoría de compañías españolas.

El informe ha puesto de manifiesto además que, conscientes del riesgo que suponen los impagos, el 47% de las entidades españolas está exigiendo el pago por adelantado como medida para combatir la morosidad, seis puntos porcentuales por encima de las que lo hacían el año pasado.

Intrum ha señalado que estos resultados «confirman que la cultura de la prevención contra impagos está siendo una de las estrategias más implantadas por las compañías para evitar pérdidas económicas», destacando que esto permite a las empresas tener un mayor control de sus finanzas en un contexto de incertidumbre.