CCOO reclama el fin del «claro subregistro» del cáncer laboral

03/02/2023

Luis Martínez del Amo. Amianto, polvo de madera y de sílice, benceno, dioxinas, aminas y formaldehído, principales agentes cancerígenos.

Apenas medio centenar de casos de cáncer laboral fue detectado en España en 2021. La cifra contrasta con las 113.000 muertes, que un año después se detectaron en total en nuestro país. Y con los más de 500 agentes cancerígenos (incluyendo los probables y los posibles) cuya exposición provoca o puede provocar la enfermedad, según la Organización Mundial de la Salud.

Se trata, según Comisiones Obreras (CCOO), de un “claro subregistro” de los casos de cáncer laboral en España. “En 2021 solo hubo 49 partes comunicados por exposición a agentes cancerígenos”, relata, en vísperas del Día Mundial contra el Cáncer que se celebra este sábado, 4 de febrero.

El sindicato considera que se debe mejorar el sistema de reconocimiento de enfermedades profesionales. Y pide un plan estratégico nacional, que mejore la notificación de casos, y ponga el acento en cuestiones como la investigación y la prevención de su exposición.

Se trata de lograr la exposición cero a las más de 500 sustancias sobre cuya exposición hay sospechas o certezas de que provocan cáncer en el ser humano. Según el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (IARC, por sus siglas en ingles), a día de hoy se conoce la existencia de 122 agentes cancerígenos; 93 probables agentes cancerígenos; y 319 posibles agentes cancerígenos, asegura el centro dependiente de la OMS.

En España, de los 49 partes presentados, 25 se corresponden con la exposición al amianto; en tanto que solo uno se refiere a la exposición al polvo de sílice cristalina, informa la rama de construcción del sindicato, CCOO Hábitat.

Bomberos, peluqueros, trabajadores de la industria de la madera y el mueble, bomberos forestales y otros profesionales de este departamento del sindicato deben guardarse además de la exposición a otros agentes cancerígenos, como polvo de madera, formaldehído, aminas, benceno y dioxinas.

Si no lo hacen, corren el riesgo de engrosar la larga lista de las personas que fallecieron por cáncer, la segunda causa de muerte en los países desarrollados. En 2020, murieron en España más de 113.000 personas por este motivo, más que por Covid-19, y casi un 18% más que un año atrás.

Pero lo peor está por llegar, a juzgar por las previsiones de la Sociedad Española de Oncología Médica, que calcula que, en 2040, aumentarán un 41% las muertes por cáncer, hasta afectar a 160.000 personas.

“Reclamamos un plan estratégico nacional contra el cáncer laboral”, defienden desde CCOO. Un plan que promueva la exposición cero a agentes cancerígenos. Y que prime la investigación y la prevención en la materia.

“Exigimos prevención”, remata el sindicato, que recuerda que, entre los hombres, los cánceres más letales son los de pulmón colón, próstata, páncreas y vejiga; en tanto que, entre las mujeres, el cáncer más mortal es el de mama, seguido de los de pulmón, colon y páncreas.

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