El Producto Interior Bruto (PIB) de Rusia sufrió una contracción del 2,1% en 2022, según la primera estimación del dato anunciada por sorpresa por la agencia estadística rusa Rosstat, que había retrasado la publicación al miércoles 22 de febrero desde la fecha inicialmente prevista del 17 de febrero.

Esta caída a pesar de suponer un profundo deterioro respecto de la expansión del 5,6% en 2021, supone una recesión menos intensa de lo previsto inicialmente. Y también menor profunda que el impacto de la pandemia, que hizo que el PIB cayera el 2,7% en 2020.

El dato preliminar ha superado las expectativas del Banco de Rusia, que auguraba una caída del PIB del 2,5% en 2022, así como del Ministerio de Desarrollo Económico, que en de septiembre proyectó una contracción del PIB del 2,9%.

La agencia estadística rusa no ha publicado aún cifras relativas al comportamiento de la economía en el cuarto trimestre, tras haber estimado en un 3,7% la contracción del PIB del tercer trimestre en términos anuales y en el 4,1% la del segundo trimestre, mientras que entre enero y marzo de 2022 la economía rusa creció un 3,5%.