El mercado inmobiliario sigue en pleno auge a pesar de las subidas de los tipos de interés en las diferentes hipotecas. Hoy en día, conseguir una hipoteca con condiciones buenas o aceptables se está convirtiendo en todo un reto, y es que aunque en el mercado hay muchas ofertas disponibles, los intermediarios profesionales son quienes realmente cuentan con las mejores herramientas para conseguir cerrar un buen trato.

Por ello, contar con intermediarios hipotecarios especializados como Grocasa Hipotecas, con una amplia cartera de clientes y que miren por los beneficios e intereses particulares de cada uno de ellos, es la opción más viable y acertada para conseguir una hipoteca con buenas condiciones a un largo plazo de tiempo.

¿Cuáles son las principales ventajas de contar con brókers hipotecarios?

La situación mundial actual, con la inflación, la caída del Euro y la guerra entre Rusia y Ucrania, ha hecho que el sector hipotecario se resienta. Es decir, que los tipos de intereses suban, que las condiciones sean más estrictas y que incluso se estén denegando muchas hipotecas a personas que hace tan solo unos meses la hubieran podido conseguir.

Es por eso que contar con la ayuda de un bróker hipotecario se ha vuelto tan importante. Además de por las siguientes ventajas que explicamos a continuación:

– El bróker lleva a cabo un estudio personalizado sobre las situaciones, circunstancias y necesidades concretas que tiene cada cliente.

– Con toda esta información, realiza una búsqueda exhaustiva de las ofertas que hay en el mercado y que mejor se ajustan a cada cliente.

– Realiza una selección de las más beneficiosas y se las presenta a cada cliente para que éste pueda valorar cuál es la que más le conviene.

– Lleva a cabo una explicación hipotecaria fácil de entender y resuelve las dudas que puedan surgir al respecto.

– Tiene acuerdos con las diferentes entidades financieras que proporcionan mejores condiciones a sus clientes.

– Al tener una amplia cartera de clientes, tiene más ‘fuerza’ para poder llevar a cabo negociaciones favorables.

– Una vez el cliente se ha decidido por la hipoteca que más le conviene, se encarga de todo el papeleo y de organizar la firma de la escritura.

Los prestamistas particulares

Cuando los bancos rechazan la petición de una hipoteca, muchas personas optan como última opción al recurso de los prestamistas particulares. Aunque es algo que existe desde hace muchísimo tiempo, es ahora, ante las dificultades que hemos explicado anteriormente, cuando muchas personas vuelven a contratar sus servicios.

Los prestamistas particulares funcionan del siguiente modo:

–  Prestan su propio capital a otros inversores o fondos inmobiliarios asegurando su dinero con bienes raíces que valen mucho más que el propio préstamo. Y, al hacerlo, reciben un retorno de la inversión o una división del capital social.

–  El funcionamiento es muy sencillo, ya que tiene muchas similitudes con los préstamos de las entidades bancarias: se entrega el dinero al deudor, y éste se compromete a devolverlo en el plazo estipulado añadiendo el pago de los intereses pactados en el momento de la contratación.

Parece muy sencillo y tan fácil como si la hipoteca la concediera un banco, sobre todo por la facilidad y los requisitos menos exigentes que solicitan, pero en realidad es muy importante saber por qué evitar prestamistas particulares. Y es que los riesgos de acudir a un prestamista particular son mucho más elevados y sus condiciones más abusivas:

–  Por norma general los tipos de interés son mucho más elevados que los que ofrecen los bancos pudiendo llegar incluso al 30% del capital prestado

–  Los prestamistas privados exigen, siempre, la participación de avalistas. Así su riesgo es menor pero el riesgo de la persona que contrata sus préstamos aumenta considerablemente, sobre todo para las terceras personas que se ven obligadas a formar parte del contrato.

–  Los intereses de demora son muy elevados.

–  Suelen poner muchas trabas a la posibilidad de una liquidación anticipada, aplicando una penalización importante.

Si necesitas una hipoteca, ponte en manos de brókers hipotecarios expertos que te garanticen la máxima transparencia, legalidad y fiabilidad. Y evita, siempre que puedas, acudir a prestamistas particulares que, a corto, medio y largo plazo, te van a suponer un coste y riesgo excesivo.