José Ángel Mañas, el autor de «Historias del Kronen» y de «Mensaka», vuelve a la novela histórica con «Guerrero. El español que quiso ser maya» (Algaida, 226 páginas). La historia de Gonzalo Guerrero, un soldado curtido en las filas de Gonzalo Fernández de Córdoba, el Gran Capitán, ya ha sido contada en otras obras, como en «El renegado», de Julio Castedo.

En enero de 1512, una nave procedente de la primera colonia en Tierra Firme, regresa la isla La Española, pero naufraga en la costa de Jamaica, y una veintena de supervivientes terminan en Yucatán, donde son apresados por los cocomes.

De todos los españoles solamente quedarán dos, el seminarista Jerónimo de Aguilar y el soldado Gonzalo Guerrero, que se benefician del odio de los cheles a los cocomes.

Mientras Jerónimo de Aguilar se mantiene célibe, pese a las provocaciones de las mujeres chelas, Gonzalo Guerrero se convierte en «el español que quiso ser maya» y utiliza su experiencia militar con el Gran Capitán para que el pueblo que le rescata triunfe sobre sus enemigos.

Casado con la princesa Za’asil, con la que tiene varios hijos, se identifica con los cheles hasta el punto de transformarse en uno de ellos y combatir, como tal, a los invasores españoles de la primera expedición de Hernán Cortés.

José Ángel Mañas, que ya ha cultivado la novela histórica en «Conquistadores de lo imposible», «El hispano», «¡Pelayo!» y «Fernán González», y que busca «descifrar la realidad de mi país, a veces mirando de frente al pasado y a veces buceando en el pasado», combina con gran habilidad las peripecias de Gonzalo Guerrero con historias de los éxitos que éste vivió con el Gran Capitán en la conquista de Granada y en Italia.

Y aporta una visión de la transformación del conquistador español en un maya que va mucho más allá de la imagen clásica del renegado. Hasta el punto de comprender al hombre que llegó a ser el Gran Capitán de los mayas.