La variable ‘talento’ se transforma en la era del cambio, impulsada por los avances tecnológicos

24/04/2023

Marta Merino, directora de TalengoTech. Ofrezco tres claves para la gestión del ciclo del talento.

Vivimos un momento de transformación sin precedentes, en el que la velocidad aboca a las empresas a un proceso permanente de evolución y adaptación. Sólo así pueden dar respuesta a los retos que plantea el mercado, sobre todo los clientes. Pero si la exigencia es máxima de forma externa, los cambios internos en las compañías son igual de radicales. Sin embargo, no han avanzado a la misma velocidad.

La disrupción que genera la tecnología es ya irreversible y ha afectado de lleno en la gestión del talento de las organizaciones. Las compañías han sofisticado mucho en los últimos años su estrategia en torno a las personas. Lo que antaño fueron acciones con foco hacia los tres momentos clave en el ciclo de relación de los profesionales con las empresas —captación, evaluación y transformación—, ahora se ve como un proceso circular. Por un lado, el profesional está construyendo su propia carrera, con visión a largo plazo y en función de unos objetivos y valores; y por otro, la empresa ofrece un soporte para el diseño de ese itinerario y una experiencia anclada en un liderazgo de futuro.

Imagen: Andrea Piacquadio (obtenida en pexels.com y modificada).

En el sector tecnológico este proceso es aún más complejo. La tecnología produce cambios sistémicos que afectan a la cultura y a los valores, y eso implica redefinir todo el ciclo del talento. Además, las compañías necesitan tanto a profesionales que dominen las herramientas y la cultura digitales, como a líderes que sepan gestionar el cambio, innovar, inspirar y potenciar a sus equipos, sin olvidar alinear la estrategia con los objetivos de negocio. En este entorno tan exigente, el trabajo durante todo el ciclo de desarrollo del talento es crucial para el éxito de las organizaciones.

Claves para gestionar el ciclo del talento
Llevamos ya tiempo hablando de la importancia de gestionar el ciclo integral del talento, pero hemos invertido poco para debatir sobre cómo lograrlo. Estas son las claves:

♦ Captar talento en el mercado. Es muy importante diseñar una buena estrategia para impactar en aquellos profesionales que de verdad son impulsores de una disrupción digital. Y es preciso hacerlo con un enfoque que contemple la incorporación de nuevos roles; las demandas de las nuevas generaciones —que no siempre comparten los valores y objetivos de las anteriores—, y la alineación de todo ello dentro de un propósito que provoque un impacto positivo a largo plazo.

En este momento, la demanda de estos perfiles es tan alta que esa ansiedad se traslada al mercado de candidatos. Y se obvia muchas veces el cuidado necesario en la trasmisión de la propuesta de valor por parte de la empresa empleadora, incluso la personalización del ajuste del candidato al proyecto, tanto desde el punto de vista técnico como estratégico.

♦ Detectar talento en la organización. No sólo se trata de fichar al talento, una organización tiene que dar una oportunidad a los profesionales que ya están dentro y promover esa cultura. Esto se consigue con programas específicos en todas las áreas que acompañen a los profesionales en su evolución hacia liderazgos técnicos. Es imprescindible identificar a los que serán los referentes del equipo y apoyarlos; se convertirán en piezas clave para minimizar los riesgos de fuga del talento.

Los equipos técnicos necesitan referentes a los que admirar, y un rol que evoluciona no tiene por qué tener desarrolladas las habilidades que logran transformar grupos en equipos. Y, por supuesto, necesitamos referentes femeninos en puestos de liderazgo técnico. Porque las mujeres en compañías tecnológicas necesitan verse reflejadas e identificarse con otras mujeres en ese mundo.

♦ Invertir en el talento interno. Como decía al principio, el cambio que estamos viviendo no es tecnológico, sino cultural, con todo lo que ello implica. En este sentido, lo más importante es que el liderazgo de la compañía esté alineado. Es un concepto un poco manido de tan repetido, pero no tan sencillo. La velocidad a la que evoluciona la tecnología obliga a las empresas a estar alerta; deben ser conscientes de cómo les impactará. Nos movemos en un entorno en el que un grupo de profesionales brillantes con buenas habilidades en una startup es capaz de tumbar a una compañía que no ha sabido adaptarse al cambio ni a la mentalidad. Es necesario redefinir procesos y perfiles y, en este camino, debemos apostar por la diversidad y el liderazgo sostenible.

 

Marta Merino, directora de Talengo Tech.

Marta Merino ha sido nombrada recientemente directora de Talengo Tech, el área de la firma independiente de expertos en liderazgo Talengo especializada en búsqueda, evaluación y transformación del talento dentro del sector tecnológico, y una de las más críticas para las empresas en este momento de cambio.


Más información

⇒ Seguir en Twitter a @TalengoINT

 

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