Esta segunda partida de funcionarios trabaja en ministerios, organismos estatales y otras instituciones del servicio civil. De ellos, según el diario, 12.000 estaban cerca de jubilarse –habían cumplido 33 años de servicio– mientras que otros 7.000 están empleados por organismos que van a cerrarse o a fusionarse con otros en el marco de las medidas de ajuste.
La semana pasada, las autoridades ya habían iniciado la transferencia a la reserva laboral de unos 14.000 funcionarios que estaban próximos o en edad de jubilarse. Los funcionarios afectados por esta medida percibirán el 60% de su salario durante doce meses antes de que se vuelva a estudiar su situación.
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