La presidenta de Grecia, Katerina Sakellaropoulou, ha promulgado el decreto por el que convoca formalmente para el 25 de junio las nuevas elecciones parlamentarias, después de que los principales partidos no lograsen consensuar una coalición a partir de los resultados surgidos de los últimos comicios, celebrados el 21 de mayo.

El decreto, firmado también por el primer ministro interino, el juez Ioannis Sarmas, implica la disolución del actual Parlamento, que este mismo lunes había elegido a su nueva mesa, en la que repetía como presidente el conservador, Konstantinos Tasoulas. La constitución de la futura Cámara se ha fijado para el 3 de julio.

Para la segunda cita con las urnas, Grecia recuperará un sistema electoral que recupera la prima de escaños para el partido más votado, lo que en teoría elevará a la Nueva Democracia de Kyriakos Mitsotakis al umbral de la mayoría absoluta. El 21 de mayo, este partido ya obtuvo más del 40 por ciento de los sufragios, el doble que SYRIZA, que repetirá con Alexis Tsipras como candidato.