Políticos, ONG y compañeros de profesión han expresado su sentir por el fallecimiento del escritor y corresponsal de guerra este miércoles por la noche a los 68 años de edad y a consecuencia de dos cáncer que él mismo dio a conocer el pasado mes de octubre en la Cadena Ser, medio de comunicación con el que colaboraba.

Desde la red social Twitter, el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha destacado que Lobo «dignificó todo cuanto hizo». «El ejemplo de su mirada honesta y comprometida nos acompañará siempre», se despide Sánchez que envía un abrazo a su familia y amigos.

Durante su carrera profesional, Lobo cubrió diversos conflictos por todo el mundo como Croacia, Serbia, Bosnia-Herzegovina, Albania, Chechenia, Irak, Argentina, Haití, Ruanda, Nigeria, Guinea Ecuatorial, Sierra Leona, Uganda, Congo, Zimbabue, Namibia y Filipinas.

Precisamente, varios de sus colegas en los conflictos han manifestado su pesar por la pérdida del periodista, como Manuel Ovalle Álvarez, que acompaña un ‘Descanse en Paz’ con una foto tomada en mayo de 1995 en la guerra de Sarajevo y en la que aparecen ambos junto a Julio Fuentes y Sergio González y Miguel Gil. «Sólo quedamos tú y yo», le dijo Lobo hace un año a Ovalle, que ahora se queda como único representante vivo de aquella fotografía de reporteros.

El también reportero Mikel Ayestarán escribe LOVE (amor) recuerda su faceta como padre de la revista 5W, al colega y al corresponsal de la vieja escuela. «El apellido Lobo se transformaba en LOVE a los pocos minutos de conocerle», rememora.

El también periodista Luis de Vega se queda con la conversación en su casa justo el mismo día de su muerte, horas antes de que le sedaran. «Tu humor negro mirando a la muerte a la cara. Nuestro abrazo, mi beso de despedida. Querido Ramón Lobo, qué lección de vida», concluye.

Por su parte, el fotógrafo y periodista Gervasio Sánchez ha destacado que hasta el último aliento se ha mantenido firme y la dignidad con la que se ha comportado con gran dignidad. «Los últimos días nos ha reconfortado a todas las personas que lo queríamos con un comportamiento ejemplar. Su gran obra periodística perdurará», elogia.

Otro de sus compañeros en coberturas bélicas, Arturo Pérez-Reverte, se despide de Ramón Lobo como «reportero de guerra» y «viejo compañero» y destaca algunas de las batallas en las que coincidieron, como Los Balcanes, Iraq, Afganistán o África. A Pérez Reverte se le va «uno de los últimos grandes de la antigua tribu de los enviados especiales».

Su colega en la Cadena Ser Carlota Estefanía recuerda que cuando el ahora occiso se despidió de la radio ella apuntó una frase que Lobo comentó y que ahora está en su mesa de trabajo: «La muerte es un problema si no has vivido», al tiempo que le agradece sus lecciones hasta el último día.

Otro compañero de profesión, Isaías Lafuente desea que cuando a él le llegue el momento de morir pueda saber irse con «la dignidad» de Ramón Lobo y destaca su «grandeza profesional y personal» reflejadas sin necesidad de «añadir una coma a esta maravilla» de crónica del periodista de El País Guillermo Altares dedicada al periodista fallecido.

En alusión a la crónica homenaje de Altares y a la muerte de Lobo Mikel Ayestarán le da las «gracias por todo» a su «viejo amigo» y elogia a ‘Willy’ porque «solo» él podría despedir así a Ramón. «Gracias Willy, yo no tengo palabras», comenta. También sin palabras se ha quedado otro periodista ducho en conflictos bélicos como Jon Sistiaga que acompaña una fotografía de Lobo de un «adiós, querido Ramón».

El periodista Carlos Cué le califica de «enorme periodista y tipo único» y recuerda su empatía natural hacia todo lo que le rodeaba, al tiempo que celebra el «enorme privilegio» de haber podido disfrutar de Lobo que «no dejó un minuto sin vivir plenamente».

La periodista y escritora Maruja Torres recuerda a Lobo con una foto «cocinando unas exquisitas tortillas» de patatas para amigos reunidos en su apartamento de Beirut en octubre de 2006.

Por su parte, varios representantes del mundo de la política se han sumado a los mensajes de condolencia. Este jueves por la mañana se pronunciaba el exministro socialista José Luis Ábalos para quien hoy al periodismo «se le ha muerto algo más que un corresponsal de guerra, un cronista de sus esencias, un reportero de la conciencia». «Adiós Ramón Lobo, qué gran crónica a tu partida. Tan valiente en la vida como en la marcha. Sea para ti la paz eterna», le desea.

Durante la pasada noche expresaron su pésame el ministro de Cultura y Deporte en funciones, Miquel Iceta, quien destacó que el escritor «honró su profesión» y por ello será «siempre recordado». La ministra de Trabajo en funciones, Yolanda Díaz subrayó la «enorme pérdida» tras su fallecimiento. «Nos quedará siempre tu mirada comprometida con la verdad, con la información de calidad, con la justicia. Descansa en paz», ha escrito en redes sociales.

También el ministro de Industria en funciones, Héctor Gómez, le ha recordado como un profesional «comprometido y generoso tanto en sus crónicas como en su vida, lo que demostró hasta el último de sus días» y en la misma línea el titular en funciones de Consumo, Alberto Garzón muestra su sentir por «triste noticia» de la pérdida de Ramón Lobo «quien además de extraordinario periodista era una buena persona».
*ORGANIZACIONES

Desde Reporteros Sin Fronteras España imaginarán «siempre» a Ramón con sus palabras cuando manifestaba que pensaba en los que le adelantaron a Ítaca: Alicia Gómez Montano, Miguel Gil, Julio Fuentes y Ricardo Ortega. «Me emociona sentirles tan cerca. No creo en el Más Allá, sí en el poder de la imaginación», escribía Lobo según rememora ahora RSF.

Mientras, la revista 5W con la que Lobo colaboró subraya que ha muerto uno de los corresponsales de guerra que «han marcado» el último medio siglo y describen a Lobo como un «referente» para todos los periodistas que quieren echarse una mochila a la espalda y contar el mundo. «El vacío que deja es imposible de llenar», manifiesta.

La Asociación de la Prensa de Madrid también le define como un «referente del periodismo español» y envía su más sentido pésame a sus familiares y compañeros mientras que la Comisión Española de Ayuda al Refugiado agradece al «corresponsal de guerra con mayúsculas» su defensa del valor de contar las historias de las personas afectadas por los conflictos y su ayuda a entender por qué se ven forzadas a huir. *
Por su parte, la Fundación Vicente Ferrer considera que el mundo es un poco más triste cuando se pierden los «altavoces de los más vulnerables» y desea a Lobo que descanse en paz después de ser «cronista de tantas guerras y protagonista de su propia batalla». «Las ONG necesitamos periodistas como tú. Nos queda tu intenso legado», apunta.

Desde Amnistía Internacional despiden «con pesar y agradecimiento» a Ramón Lobo, periodista «valiente, contador de verdades, siempre del lado de los derechos humanos».