Meta ultima un sistema de suscripción por el que los usuarios de Instagram y Facebook tendrán que pagar hasta 13€ por acceder a sus servicios sin anuncios y contenido publicitario personalizado desde sus teléfonos móviles, según The Wall Street Journal.

La compañía busca cumplir con los requerimientos impuestos por la Ley de Servicios Digitales (DSA, que entró en vigor a finales de agosto) y que prohíbe a las plataformas presentar anuncios basados en el uso de datos personales, especialmente a los menores.

Con la introducción de esta regulación, Meta deberá solicitar el consentimiento de los usuarios para mostrar anuncios personalizados, hasta ahora su principal fuente de ingresos.

Meta quiere implantar una opción de pago para mantener parte de estos ingresos, al ofrecer Facebook e Instagram en una versión de pago sin anuncios. Seguirá ofreciendo versiones gratuitas de Facebook e Instagram con anuncios.