Según el informe más reciente de Hogaria.net sobre precios de vivienda, el mercado inmobiliario español registró un aumento del 0,2% en el precio de la vivienda usada en noviembre en comparación con el mes anterior. Esta subida mensual ha contribuido a una tasa interanual del 4,7%, evidenciando un constante incremento en el precio medio del metro cuadrado de vivienda usada, situándose en 1.874 euros.

El análisis revela que, durante el último mes, 35 provincias españolas han experimentado un alza en los precios de la vivienda usada. Este repunte continuo refleja una demora en el esperado ajuste del precio, principalmente debido a una disminución de la oferta, tanto en propiedades de segunda mano como en obra nueva, esta última manteniéndose en niveles mínimos.

Hogaria.net prevé que el ajuste anunciado pueda manifestarse en los primeros meses de 2024, anticipando que las reducciones en las transacciones de compraventa y el incremento de los tipos de interés empezarán a influir en los precios. Sin embargo, estiman que no se producirán «grandes variaciones».

Evolución en cada provincia

En cuanto a la evolución de precios por provincia, algunas de las que registraron mayores descensos en noviembre fueron Almería (-0,7%), Zaragoza (-0,6%), Navarra (-0,6%), Lleida (-0,5%) y Zamora (-0,5%). Por otro lado, las que experimentaron incrementos más notables fueron Santa Cruz de Tenerife (+1,1%), Salamanca (+1%), Burgos (+0,8%), La Rioja (+0,8%) y Murcia (+0,7%).

En el desglose por provincias, Islas Baleares (3.810 euros), Guipúzcoa (3.316 euros) y Barcelona (3.220 euros) se mantuvieron como las zonas más costosas para adquirir vivienda usada en noviembre. Les siguieron Madrid (3.209 euros) y Vizcaya (3.168 euros). En el otro extremo, Ciudad Real (1.140 euros), Palencia (1.174 euros), León (1.183 euros), Badajoz (1.262 euros) y Ourense (1.275 euros) se posicionaron como las provincias con precios más económicos por metro cuadrado.

Estos datos reflejan una tendencia alcista sostenida en el mercado de la vivienda usada en España, aunque se espera que factores como la disminución en las transacciones y el aumento de los tipos de interés puedan ejercer presión a la baja en los precios en los próximos meses, aunque sin grandes fluctuaciones previstas en el corto plazo.