El Gobierno argentino ha dado a conocer una serie de medidas económicas sin precedentes lideradas por el ministro de Economía, Luis Caputo, en un intento por enfrentar el déficit fiscal y evitar una crisis más profunda en el país. Estas decisiones incluyen una devaluación del peso argentino en más del 50%, el cese del gasto en obras públicas, reducción de subsidios en energía y transporte, y un aumento significativo en programas de ayuda social.

Caputo anunció que el peso argentino se devaluará drásticamente, pasando de 366,45 a 800 pesos por dólar estadounidense, en un esfuerzo por abordar el déficit fiscal que ha estado afectando a la economía del país. Explicó que estas medidas buscan evitar mayores índices de inflación y pobreza, calificando el déficit fiscal como el principal problema que enfrenta Argentina en la actualidad.

En un discurso que marcó un cambio notable en las políticas gubernamentales, Caputo reveló que el gasto en nuevas obras públicas será eliminado por completo. Además, se recortarán los subsidios de energía y transporte, argumentando que mantener precios bajos en estos sectores ha contribuido a una inflación sostenida.

A pesar de los recortes en el gasto público, el ministro aseguró que programas sociales vitales, como ‘Potenciar Trabajo’, se mantendrán de acuerdo con el presupuesto establecido para 2023. También anunció un aumento sustancial en la asignación universal por hijo y en la ‘Tarjeta Alimentar’, buscando proporcionar un alivio a aquellos sectores más vulnerables de la sociedad.

Entre otras Argentina anuncia drásticas medidas económicas: devaluación del peso y recortes en gasto públiedidas para reducir el gasto estatal, se contempla la no renovación de contratos laborales con menos de un año de vigencia en el sector público y la suspensión de la publicidad gubernamental durante un año.

Se prevé un shook inicial

El presidente argentino, Javier Milei, reconocido por sus políticas económicas ultraliberales, expresó durante su investidura que estas decisiones podrían empeorar la situación económica a corto plazo, pero aseguró que sentarán las bases para la reconstrucción del país a largo plazo. Milei, desde su ascenso al poder, ha abogado por políticas de austeridad y recorte del gasto público como parte de su estrategia económica.

El anuncio de estas medidas ha generado incertidumbre entre la población y sectores económicos, mientras se espera observar cómo impactarán en la situación económica y social de Argentina en los próximos meses.

La implementación de estas acciones sin precedentes busca reestructurar el panorama económico del país, pero su efectividad y repercusiones a corto y largo plazo serán tema de seguimiento y análisis por parte de expertos y ciudadanos por igual.