Como consecuencia de haber ejercido de telonero de Son Volt en el primer concierto de los norteamericanos en Londres, Peter Bruntnell encontró siempre el respaldo de Eric Heywood y su pedal-steel y el del líder de los Volt, Jay Farrar. Esa ayuda se plasmó en el álbum del neozelandés Bruntnell, “Ends Of The Earth”, que celebra los veinte años de su edición.

Bruntnell tiene muchos y muy buenos discos, pero éste, el cuarto de su producción, es el mejor. Es en el que interpreta ese suave por rock teñido de country y de americana con voz más sedosa y acariciadora, a lo Evan Dando y Joe Pernice. Y es en el que tiene más canciones inspiradas, como la que da entrada al álbum, “Here Come The Sweels”, un medio tiempo muy Matthew Sweet, como lo es también el tema que da título al disco, un baladón insuperable.

Igualmente son grandes, “One Drink Away”, que te columpia como mecedora de porche
estival. Por su parte, “City Star”, “Tabloid Reporter”, “Black Aces” y “Rio Tinto” beben de sus fuentes natales, como son Uncle Tupelo, Jackson Browne y Son Volt.

Sello: Loose. Precio: 7, cd. Discografia: “Normal For Bridgewater”, “Nos Da Comrade”,
“Cannibal” (ep). Influido por: Son Volt, Jayhawks, Joe Pernice. Influye en: Israel Nash,
Corizonas, L.A.

Captain Soul y el pop amable

Se cumplen veinte años de su gran “Jetstream lovers”. Captain Soul tomaron prestado su nombre de una canción de The Byrds. Y no solo el nombre. Embebidos como estaban del sonido de las guitarras de doce cuerdas y de las melodías armoniosas y los coros directos, también recogieron su sonido, junto al de Neil Young, Zombies
y Beach Boys. Con esos mimbres, además del apoyo de Alan McGee, -líder del sello Creation y luego de Poptones y descubridor de Oasis, My Bloody Valentine y Teenage Fanclub, entre otros-, hicieron un par de álbumes memorables.

En especial “Jetstreams Lovers”, su mejor álbum. Apareció en 2003 y fue saludado como el disco de la gran esperanza blanca para los que amamos los estribillos amorosos, las canciones sensibles y las composiciones amables. Nacida tras la disolución de Hooverdam, la banda llenó de clase y finura un disco que presentaba delicias auditivas como “Looking for love”, una de las canciones pop perfectas en la historia del pop, y no crean que hay tantas.

También metieron “i am a Rolling Stone” otra copa de gran reserva en la que, en los posos, se atisban unos coros homenajes a “Sympaty for The Devil” de los Stones. También “it´s alright, its ok” (su modestia les hacía escribir los títulos en minúscula. “make your day”; mankiller”, una mezcla ejemplar entre Crosby y el british alternativo. Y la Teenage Fanclub “she moves on wáter”.

El reciente 22 de octubre se cumplieron también los veinte años de su inolvidable
actuación en Madrid. De ella, tengo recuerdos y autógrafos que no pienso vender nunca.

Sello: Poptones/Houston Party. Precio: 6, cd. Discografía: “beat your crazy head against the sky”, “T-Shirt 69” (ep). Influidos por: Byrds, Neil Young, Teenage Fanclub, Zombies. Influyen en: Joe Pernice, Jeremy, Andrew Taylor, Coke Belda.