El Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas, reunidos en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, no han llegado a un acuerdo sobre la obligatoriedad del uso de la mascarilla en centros sanitarios, residencias y farmacias.

La ministra de Sanidad, Mónica García, desvela que, durante la reunión del Consejo Interterritorial,  se han recogido algunas propuestas de las comunidades y se les ha dado un plazo de 48 horas para entregar todas sus aportaciones, como puede ser ampliar estas recomendaciones de mascarilla en las farmacias.

«Hemos hablado y hemos reflexionado profundamente sobre el papel de la mascarilla, sobre todo en centros sanitarios, en hospitales y centros de salud, para proteger tanto a pacientes como a profesionales, como una medida que es efectiva, una medida que es de sentido común, una medida que está avalada por la evidencia científica y que es bien recibida por la población», señala Mónica García.

Los ingresos hospitalarios por gripe se han incrementado un 60% en una semana, hasta los 9,5 casos por 100.000 habitantes, 3,6 puntos más que la semana previa, y subiendo desde finales de octubre, según los últimos datos del Sistema de Vigilancia de Infección Respiratoria Aguda (SiVIRA) del Instituto de Salud Carlos III.

El viernes 5 de enero ya se decretó el uso obligatorio de la mascarilla en centros sanitarios y sociosanitarios de la Comunidad Valenciana, Cataluña y la Región de Murcia, y Aragón decidió una implantación parcial, tan solo para los profesionales sanitarios y de cuidados en centros sociosanitarios.

Mónica García defiende  «unificar criterios» para el abordaje de «los picos de virus respiratorios» que se están produciendo en España.

Otra de las propuestas, y que ya se está estudiando, «es la autojustificación de las bajas de tres días, para aquellos que tengan una enfermedad leve». En esta situación inicial de enfermedad, «no es necesario que se vaya al médico y, sin embargo, les estamos de alguna manera obligando a que vayan a por un parte», señala la ministra de Sanidad. «Es una medida que ya se ha tomado en muchos países», y que se basa en la declaración responsable durante los tres primeros días. La medida de la ‘autobaja’ médica ya fue adoptada durante la pandemia para evitar el contagio de la Covid-19 en los centros sanitarios.

Es una demanda «histórica» de los profesionales sanitarios, ya que evita «burocratizar y colapsar más todavía la Atención Primaria». Todo aquel que tenga algún síntoma, solo tendría que llamar al trabajo para avisar de su sintomatología pero sin tener que enviar ningún parte médico ni justificante los tres primeros días; «basta con la palabra para que la ausencia esté justificada», explica la ministra de Sanidad.

La incidencia de gripe en estos últimos días «es para preocuparse» ya que «estamos en unos niveles de mayor intensidad que los últimos años» y que el problema no es tanto las infecciones como el colapso sanitario.