El Global Energy Weekly de Bank of America Research apunta a la actividad de extracción de petróleo de esquisto (shale oil) como gran responsable de la caída global de los precios del crudo, pero advierte del descenso en la actividad y la inversión en EEUU y pronostica una desaceleración en la producción total de petróleo estadounidense.

“La actividad de exploración y producción ya se está ralentizando, especialmente entre las empresas de exploración y producción privadas, que han reducido su número de plataformas operativas (rig count) en un 40% desde el máximo alcanzado en 2022. Esperamos descensos en la parte alta de un dígito en la apertura de pozos en las cuencas petrolíferas y vemos que el crecimiento total de la oferta de crudo de EE UU se ralentizará hasta los 440.000 barriles interanuales en 2024”, explica Francisco Blanch, responsable global de materias primas de Bank of America Research