No se cumplieron los pronósticos. El Partido Popular vuelve a lograr la mayoría absoluta en Galicia, aunque con dos escaños menos Alfonso Rueda que Alberto Núñez Feijóo. Pero con sus 40 diputados autonómicos, supera en dos el listón para la mayoría absoluta, por lo que podrá gobernar en solitario sin problemas.

El Bloque supera claramente al PSG: 25 a 19, los nacionalistas ganan seis, y cuatro escaños pierden los socialistas.

Solo Democracia Ourensana cumple lo que preveían las encuestas y logra un diputado.

Ni Vox, con 30.000 votos, ni Sumar, 26.000, 12 veces más que Podemos, entran en el Parlamento autonómico.

La mejor noticia, sin duda, el récord de participación, aunque no haya servido para que se produzca el cambio político en Galicia.