El incremento del 16,25% de pasajeros en los aeropuertos españoles se convierte en un beneficio de 1.631 millones€ para Aena, un 81% más que en 2022 y un 13% mejor que antes de la pandemia. El consejo llevará a la junta del 18 de abril la propuesta de un dividendo de 7,66€ por acción en efectivo, el 61% más que en 2022, y que supone el 80% del beneficio

“Nos encontramos muy cómodos con un pay out del 80% a la vista de que nuestra ratio de deuda frente al ebitda es bajo, de dos veces”, explica su presidente, Maurici Lucena.

El resultado neto se ha visto impulsado por extraordinarios financieros: 36 millones por la remuneración de depósitos en Brasil, 11 millones por tipos de cambio favorables y 23,2 millones por la valoración de derivados. También se recuperan 155 millones en provisiones por el hundimiento del tráfico en Brasil durante la pandemia. Ayuda el salto en los ingresos internacionales hasta los 616 millones (+26,9%); un alza del 14% en las ventas comerciales por viajero (de 4,8 a 5,8 euros), y la fuerte caída en el gasto eléctrico.

El ebitda fue de 3.022 millones, con un incremento del 45,4% , por lo que se adelanta un año el objetivo fijado en el plan estratégico 2022-2026 de retornar al existente antes de la pandemia.

Precisamente, Aena actualizará el  7 de marzo ese Plan Estratégico. Una semana antes, entra en vigor un nuevo marco tarifario por el que la operadora ha obtenido una subida del 4,09% (40 céntimos de media por viajero) para compensar costes que en 2022 estuvieron marcados por la alta inflación. El ingreso máximo anual ajustado por pasajero que cobra Aena llegará a los 10,35 euros, desde los actuales 9,95 euros.