Rodrigo Buenaventura, presidente de la CNMV

La «transformación que impone la digitalización, la descarbonización y la necesidad de reactivación de la inversión en defensa», entre otros, va a tener un coste muy elevado. En concreto, 700.000 millones de euros anuales, según ha confirmado el presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Rodrigo Buenaventura, recordando las estimaciones de la Unión Europea.

Para financiar este elevado coste, evidentemente, no basta con los presupuestos públicos ni con la banca, según Buenaventura, quien apuesta por los mercados de capitales para «el tsunami de inversión extraordinaria» que se avecina, según reconoció en el IV Observatorio de las Finanzas organizado por ‘El Español’ y su portal ‘Invertia’.

Dado el protagonismo que van a tener los mercados de capitales, Buenaventura apela a que más ciudadanos inviertan sus ahorros en instrumentos financieros a largo plazo y que más empresas se acerquen a los mercados y capten financiación de forma directa. Y junto a ciudadanos y empresas, el presidente de la CNMV también agrega que se necesitan que más fondos, fondos de pensiones, compañías de seguros -es decir, inversiones institucionales- inviertan en los mercados españoles y que, además, España se mantenga abierta al capital internacional.

«La revitalización de los mercados de capitales como vía de financiación de las empresas españolas y las empresas europeas para abordar esas inversiones extraordinarias que tenemos que materializar en los próximos años es una cuestión, a mi juicio, auténticamente estratégica para la economía española y para la economía europea», ha afirmado el supervisor del mercado de valores durante su intervención en la jornada de Finanzas.

Ciudadanos y empresas dependen más del crédito bancario que en EEUU

A su juicio, el problema «de raíz» es que las empresas, tanto españolas como europeas, dependen tres veces más del crédito bancario que sus competidores estadounidenses. Por ello, recomienda actuar sobre los incentivos que tienen los ahorradores y las empresas para seguir ahorrando y cambiar sus patrones de comportamiento.

Por ello, apostó por ser «imaginativos» a la hora de identificar incentivos concretos que contribuyan a cambiar los comportamientos y mejorar la estructura de financiación de las empresas.

Por otro lado, Buenaventura confirmó que en 2023 se gestionaron activos por valor de 365.000 millones de euros, con 16 millones de partícipes. También ha enviado un mensaje de tranquilidad, ya que los riesgos que asolan a los fondos de inversión afectan de manera residual a España. Por ello, aconsejó ser «extraordinariamente prudentes» al hablar de riesgos de un modo genérico y englobar distantes tipologías de todo tipo «como si todo fuera homogéneo, que no lo es».

En todo caso, ha concretado que en España no hay fondos de valor constante con promesa de reembolsos; el apalancamiento de los vehículos es bajo en términos comparativos e históricos y la exposición al mercado inmobiliario, o la exposición directa al mercado inmobiliario, es muy inferior a la de otros países de la Unión Europea o de nuestro entorno.