Mantener un MacBook limpio, tanto interna como externamente nos ayudará, además de a preservar su apariencia estética, a asegurar un funcionamiento óptimo a lo largo del tiempo. La acumulación de polvo, suciedad y el desorden de archivos afecta la apariencia y la higiene del dispositivo, además de tener un impacto significativo en su rendimiento y los años que podremos seguir utilizando nuestro equipo antes de tener que recurrir a uno nuevo. En conclusión, la limpieza regular de tu MacBook, tanto por dentro como por fuera, es una inversión en su rendimiento, capacidad de almacenamiento y durabilidad.

Parte 1: Limpieza manual de tu MacBook

Mantener tu MacBook limpio no solo implica el uso de alguna app segura de usar para eliminar archivos innecesarios; también puedes realizar muchas tareas de mantenimiento manualmente. Estas tareas se pueden dividir en dos categorías principales: limpieza de software y limpieza física.

Limpieza de software manual

1. Uso de Terminal para detener procesos que consumen muchos recursos para liberar memoria y CPU. Sin embargo, es importante usar esta herramienta con precaución para evitar borrar o modificar archivos críticos del sistema.

• Limpia la memoria RAM y el caché del disco. Aunque ten en cuenta que este comando solo debe usarse cuando sea necesario, ya que macOS gestiona eficientemente la memoria por sí solo.
• Busca y elimina archivos grandes manualmente. Pero ten cuidado al eliminar archivos para no borrar datos importantes del sistema o personales. Es recomendable mover los archivos a la papelera manualmente después de identificarlos para tener una capa adicional de seguridad antes de eliminarlos permanentemente.
• 2. Gestión manual del almacenamiento. Revisa regularmente tu carpeta de Descargas y la biblioteca de documentos para eliminar los archivos que ya no necesites. macOS dispone además de otras herramientas integradas en el Finder para ayudarte a identificar y gestionar el almacenamiento, como la función «Optimizar Almacenamiento» que te permite revisar y eliminar archivos grandes, copias de seguridad antiguas de iTunes y otras.

Limpieza física del MacBook

La limpieza regular de la carcasa, la pantalla y el teclado de tu MacBook también puede prolongar la vida útil del dispositivo. Pero no lo hagas a la ligera:

1. Usa un paño de microfibra suave y seco para limpiar la superficie de tu MacBook, y eliminar el polvo y las huellas dactilares sin rayar la superficie.
2. Cuidado con el teclado y la carcasa. Si encuentras manchas difíciles de quitar, puedes usar un paño ligeramente humedecido con una solución de agua y alcohol isopropílico (70%) en partes iguales.

¡Asegúrate de apagar tu MacBook y desconectarlo de la corriente eléctrica antes de comenzar la limpieza!

Uso de herramienta automáticas y aplicaciones dedicadas

También existen numerosas herramientas automáticas y aplicaciones para realizar tareas de limpieza y mantenimiento con poco esfuerzo por parte del usuario. Estas aplicaciones son capaces de identificar y desinstalar aplicaciones que no se han utilizado en mucho tiempo, eliminar archivos duplicados, y limpiar archivos basura y la caché del navegador.

Independientemente de cómo decidas limpiar tu MacBook,  el impacto de un buen mantenimiento merecerá la pena, y se verá reflejado directamente en su rendimiento y longevidad, una inversión que, sin duda, vale la pena.